Moguer

Es una localidad de múltiples orígenes porque fue habitada por fenicios, romanos y árabes hasta que definitivamente fue conquistada por cristianos. Más adelante fue creciendo y tuvo un papel importante en el descubrimiento de América porque muchos de sus ciudadanos la dejaron temporalmente para marcharse al Nuevo Mundo. 

Este es el monumento colombino más característico de Moguer porque fue visitado por Cristóbal Colón en varias ocasiones, aunque su visita más destacada fue a su vuelta de América. 

Se levantó entre los siglos XIV y XVI en estilo gótico-mudéjar y renacentista, aunque ha sido intervenido en varias ocasiones para mantener su buen estado de conservación. Es un auténtico ejemplar del arte mudéjar de Andalucía, que se extiende unos 10000 m2 aproximadamente y desde 1931 es también Monumento Nacional. Sus partes más notables son la iglesia, el claustro de las Madres y los sepulcros de mármol y alabastro. 

Se trata del templo religioso de mayores dimensiones de la provincia de Huelva, construido originalmente como una parroquia mudéjar en el siglo XIV para ser transformado en el siglo XVIII en el edificio que es hoy en día, obra del arquitecto José Álvarez. 

Fue declarada Bien de Interés Cultural en 1967 y sus enormes dimensiones hacen que su aspecto sea catedralicio, ya que cuenta con un total de 5 naves, una planta de cruz latina coronada por una cúpula y una fachada decorada con elementos barrocos. 

El Convento de San Francisco es otro de los edificios religiosos más notables de Moguer, que destaca principalmente por su iglesia y su claustro, ambos de estilo manierista. Se erigió a finales del siglo XV bajo el mandato de los señores de Moguer y también está considerado monumento colombino porque muchos de sus frailes se marcharon para evangelizar América. 

Ha sido víctima de algunas remodelaciones debido a los daños que sufrió durante la Guerra Civil, aunque más tarde se utilizó como Escuela Pública y Centro de Salud. Sin embargo, en la actualidad acoge a la Biblioteca Iberoamericana y al Archivo Histórico Municipal, que están dotados de un valioso fondo documental. 

Juan Ramón Jiménez nació y creció en Moguer, concretamente en la enorme y marinera casa ubicada en la Calle Ribera. Desde el 23 de diciembre de 1881, fecha de su nacimiento, hasta sus 4 años, el poeta vivió aquí. 

El edificio en sí procede del siglo XIX y presenta elementos mudéjares en el balcón central de la fachada, una decoración realizada bajo petición de su padre, Víctor Jiménez. Otros espacios destacables son el patio central que hay en su interior y la azotea, que sirve a su vez de mirador. 

Por otro lado, en la Calle Juan Ramón Jiménez se sitúa la vivienda donde este célebre escritor pasó su infancia y su adolescencia. Desde 1958 es la Casa-Museo Zenobia Juan Ramón Jiménez, que ofrece al visitante la posibilidad de revivir cómo era el día a día de este a través de un recorrido en el que se conservan algunos objetos personales de la pareja, muebles, cuadros y las colecciones de su biblioteca y su hemeroteca.