Peñíscola

Peñíscola ha entrado en la lista de los “Pueblos más bonitos de España” ¡y no es para menos! La ciudad es célebre por situarse en un tómbolo rocoso sobre el que se erige un imponente castillo que parece levantarse sobre el mar y que confiere al conjunto su más característico semblante. Sus calles están impregnadas de historia por todos sus costados, algo que se siente caminando por sus blancas calles o paseando por sus preciosas playas de arena fina.

El Castillo de Peñíscola, visible desde casi cualquier parte de la ciudad, fue construido por los templarios sobre la parte más alta del peñón que se interna dentro del mar. La estructura cuenta con una serie de murallas y está constituida por varios torreones. Sus obras se prolongaron durante más de 12 años, inaugurándose el castillo en el año 1307. Si hay una figura histórica asociada al castillo, ésa es la del Papa Benedicto XIII, apodado el “Papa Luna”, quién instaló en él sede papal y en donde murió en el año 1423 a la edad de 94 años.

Sin duda, la visita al castillo constituye una de las actividades más recomendables para el visitante, no solo por la belleza histórica que envuelve cada uno de sus rincones, sino también por el conjunto patrimonial que encierra entre sus murallas. Aprovecha tu visita para descubrir sus impactantes caballerizas, con bóveda de cañón, que antaño sirvieran también como dormitorio para los soldados; o también el patio de armas, desde donde disfrutarás de unas estupendas vistas al mar, y que en el pasado fuera utilizado también a modo de claustro. La huella papal se siente también en el castillo, especialmente en las dependencias pontificias, entre las que destacan la “Cámara Mayor”, la biblioteca o el estudio. También asociado a esa función de sede papal, no te pierdas el llamado “Salón del Cónclave”, todo un salón subterráneo que algunos describen como “intimidante” y del que se sospecha que pudo ser el escenario del cónclave que elegiría al sucesor del “Papa Luna”, Clemente VIII.

También podrás reconocer partes del castillo en la aclamada serie de 'Juego de Tronos', puesto que parte de su sexta temporada se desarrolló dentro de sus murallas para representar la ficticia ciudad de Meereen. Sumándose, así, a la larga lista de localizaciones reales españolas que HBO ha utilizado para contar la historia de George RR Martin en la pequeña pantalla.

Si eres un amante de la fotografía no puedes dejar de visitar el Castillo de Peñíscola puesto que, desde sus alturas y murallas, podrás sacar las mejores panorámicas de la ciudad.

Otro de los grandes atractivos del conjunto es el Parque de Artillería, que también podrás visitar en los alrededores del castillo. Se trata de un jardín botánico por el que se puede dar una tranquila caminata entre preciosas palmeras, olivos y lavandas. Se encuentra situado en la parte exterior del recinto, la zona que da al mar, y desde donde disfrutarás de unas magníficas vistas.

Aunque la zona se encuentra ajardinada desde el siglo XX, lo que hace de ella un lugar estupendo para disfrutar de un agradable paseo con vistas marítimas, en el pasado constituyó una zona de carácter militar que cumplió funciones básicas para la defensa de esta zona litoral frente a los ataques de los adversarios del reino. Dispone de baterías, túneles y toda clase de antiguos acondicionamientos militares a modo de fortificaciones que fueron construidos en tiempos de Felipe II.

Otro de los elementos característicos del conjunto es el Faro. Se encuentra situado dentro del casco urbano, en la zona inferior del castillo, y es visible desde una distancia de más de 60 kilómetros.

Peñíscola también es conocida por ser un fantástico destino turístico para disfrutar del sol y de la playa. A ambos lados del tómbolo se extienden dos largas lenguas de arena, situadas a los mismísimos pies del resto de la ciudad.

La Playa Norte es la más larga con un total de 5 kilómetros de longitud y una de las preferidas de los visitantes. Generalmente es la favorita para pasar un día de playa y, también, ofrece las mejores vistas del Casco Antiguo y del castillo.

La Playa Sur tiene una longitud mucho menor, casi un kilómetro, pero resulta ideal para la práctica de los deportes acuáticos.

Al Casco Antiguo se puede acceder por tres puertas, la principal es el Portal Fosc de estilo renacentista; la Puerta de Sant Pere fue, en su día, el principal acceso portuario; y la Puerta de Santa María, menos conocida y construida posteriormente a las demás.

Uno de los lugares más famosos es el llamado “bufador”. Se trata de un túnel natural abierto que se encuentra excavado en la roca y por el cual entra y sale constantemente la marea del mar. Se llama “bufador” debido al ruido que hace el aire al pasar por el túnel  empujado por las olas del mar que se internan por la cavidad. Junto al “bufador” encontrarás algunas terrazas donde tomar algo mientras se escucha el curioso sonido que provoca esta cavidad geológica.

La Ermita de la Virgen de la Ermitana es una preciosa construcción, blanca, adosada al castillo,  donde se encuentra la imagen de la Virgen, patrona de Peñíscola. Fue construida entre 1708 y 1714 en sustitución de una pequeña capilla situada en el mismo lugar.

El Museo del Mar recoge la historia etnológica de Castellón, su patrimonio y todo lo que significó la actividad pesquera para la comunidad.