Suvretta House

Comentarios destacados

• Postindustrialnomad

  12 julio 2007
  La Experiencia Suisa Lujosa Ideal

  Tiene un encanto del viejo mundo. Desde la perspectiva de un esquiador acostumbrado al lujo, es organizado. Dejas tus esquis afuera cuando regresas de un día de esqui, el hotel se asegura de llevarlos al almacenamiento en el sótano y tenértelos listos para el día siguiente. La comida es fenomenal en todo respecto, pero el té de la tarde fue lo máximo. Me relajé en el vestíbulo todas las tardes. Espero regresar pronto.

  

• JeffreyZ

  03 enero 2007
  Un Hotel Perfecto

  Es un hotel estupendo perfectamente ubicado justamente en las afueras de St. Moritz. Ofrece un telesquí a 50 metros detrás del hotel, una pista de hielo, curling, una piscina, un remolino, y varias saunas. Disfruté mucho de mi estancia. Llegas rápido al pueblo con el servicio lanzadera gratis desde el hotel, pero todavía te puedes relajar con las vistas fenomenales de los lagos del valle Engadine. La comida y el servicio son fenomenales, al igual que las habitaciones. Las renovaron recientemente. Solo puedo recomendar este hotel.

  

• B5582QMmaxh

  10 febrero 2017
  Excelente !!!!

  Un lugar de ensueño en donde la elegancia se mezcla a la perfeccion con la comodidad. Es un destino increíbles en donde el ambiente te atrapa y deja desconectarse y realmente disfrutar la experiencia.

  

• jos_joaquinm

  21 marzo 2017
  El mejor hotel!!

  Excelente en todo sentido, servicios, elegante. deportes. Maravilloso. Huele muy bien, comida espectacular, buenos vinos. Esqui fantástico y muy fácil y cerca del hotel. Instructores excelentes y se acomodan al horario.

  

• verob112

  07 enero 2019
  un clásico con un encanto especial

  Volvimos fascinados del Hotel Suvretta. Tiene encanto, tradición y un "algo" que lo hace especial. Hemos conocido familias que visitaban el hotel desde hace generaciones y no nos extrañó. Las cenas en el Gran Restaurante son fantásticas, elegantes, refinadas, como de otra época y nada es comparable al espacio, iluminación y exquisitamente decorado gran salón. En principio lo de vestirse elegante todas las noches nos parecía un incordio, pero acabó siendo algo esencial en nuestras cenas que añadió un toque especial y mágico. El servicio es absolutamente fantástico y efectivo en el hotel (desde la tienda de ski hasta el restaurante o el servicio de habitaciones) y las habitaciones y vistas de la cara sur del hotel son excepcionales. Lo único que debería mejorar es el kids club. El horario es limitado y no da un servicio eficaz a las familias con niños pequeños que los padres quieren esquiar como sí hacen otros hoteles. La respuesta que he recibido del hotel con posterioridad en relación con una chaqueta estropeada tampoco me ha gustado. Parece que la dirección cambió hace poco. Solo espero que no estropeen con sentido mercantilista un sitio verdaderamente excepcional.