Scandic Patria

Comentarios destacados

• Aikohitomi

  26 abril 2012
  Muy buena opcion

  Reservamos 1 noche en habitación estándar. La habitación era sencilla pero muy limpia, con espacio suficiente. Nos llamo la atención que el suelo del cuarto de baño tenia calefacción, muy de agradecer porque hacia bastante frío. Teníamos un balcón que daba a la calle principal, si hubiéramos tenido un piso mas alto, hubiéramos tenido vistas al lago (estábamos en la 3 planta). La ubicación del hotel es muy buena, justo a la entrada de la colina en la que se encuentra la fortaleza y al lado del puerto que seguramente tiene mucha vida en verano. A la izquierda del hotel se encuentran las dos calles mas ajetreadas de la ciudad con comercios, cafes, supermercados y restaurantes. Todo ello a un par de minutos andando, un poco mas allá se encuentra el mercado y la iglesia. El desayuno correcto, en cuanto se acababa algo enseguida reponían y aunque era hasta las 10 de la mañana, no tenían prisa por cerrar. La sauna es gratuita con distintos horarios para hombres y mujeres. Hay parking de pago pero también un parking exterior gratuito. La recepción muy amable, nos dieron información turística aun sin preguntar. Muy recomendable.

  

• mfdezsal

  03 noviembre 2015
  Recientemente reformado

  Paramos en esta localidad para ver su fortaleza y decidimos quedarnos a hacer noche. Encontramos este hotel, nos gustó por fuera y decidimos quedarnos y fue un acierto. Tiene parking en el propio hotel de pago, pero no se puede reservar. La habitación muy amplia y luminosa, a nosotros nos tocó con vistas a un parque. Dispone de sauna gratuita dentro del precio de la habitación. El desayuno es tipo buffet muy variado. El personal es atento y agradable.

  

• FeBoy

  27 julio 2016
  Hotel Céntrico y acogedor

  Buen Hotel bien situado en la Ciudad pequeña de Laperantaa.Buena cadena Scandic para los hoteles Escandinavos.Buen desayuno, piscina y sana Filandesa muy buena.Habitaciones y trató correcto.La calefacción alta para el frío que hacía. .....acogedor

  

• Pia R

  08 agosto 2017
  Buen desayuno ¡ no hay que perdérselo!

  El hotel Scandic Patria es un hotel correcto, limpio y una opción acertada para un alojamiento cómodo cerca del puerto y las atracciones principales de la ciudad de Lappeenranta. Hicimos un crucero a San Petersburgo desde el pequeño y encantador puerto de Lappeenranta, y la noche anterior del crucero la pasamos en el Hotel Lappeenranta Spa y a la vuelta teníamos reservada una habitación en Scandic Patria ya que ambos hoteles tenian buena puntuación y me apetecía probar los dos hoteles. Francamente me gustó más el hotel Lappeenranta. La habitación del Scandic es más austera y se sentía el ruido de la calle hasta bastante tarde (solo eran jóvenes que debían de venir de juerga y se reían en la calle). No me gustó que el armario solo tenía una cortina rígida en vez de una puerta. Lo que sí que me resultó útil, era la tabla de planchar con su plancha incorporada. Nuestra habitación se comunicaba con la de al lado, y se oía a la gente del otro lado. El baño tenía una bañera, muy alta y no me resultó cómodo trepar allí, por lo demás limpio, agradable. El personal de la recepción muy amables y serviciales, como casi todo el personal que trabaja cara al público en Finlandia, sea en una tienda como en un kiosco de helados. Deberíamos tomar buena nota de ello, allí se centran en dar un buen servicio al cliente y no a contar chismes pasando olímpicamente de los clientes como en muchos sitios aquí en España. El desayuno es francamente bueno y muy, muy variado, ¡ no hay que perdérselo bajo ningún concepto ! Aunque sólo fuera por el desayuno, vale la pena alojarse en este hotel.

  

• E2557AOglorias

  05 octubre 2017
  Manifiestamente mejorable

  El buffet estupendo. La limpieza de las habitaciones, manifiestamente mejorable: uno de los días no se molestaron en hacer la cama; dado que solo había que estirar la sábana bajera y poner encima el edredón, me parece de una total desidia.Es la primera vez que me pasa algo semejante en un hotel. Pedí un taxi y la recepcionista no sabía que había un campus universitario en la universidad vecina que se llamaba inala. Por fortuna, el taxista hablaba inglés y pude llegar sin problemas.