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Pest-Buda Hotel - Design & Boutique
- Hotel
- 4 Estrellas
Fortuna utca 3., 1014 Budapest
Valoraciones
Basado en 345 comentarios
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Ubicación
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Calidad/Precio
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Habitaciones
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Limpieza
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Servicios
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Calidad del sueño
Descripción
Ubicación del establecimiento Si decides alojarte en Pest-Buda Design Hotel by Zsidai Hotels, disfrutarás de una magnífica ubicación en pleno centro de Budapest, a solo 15 minutos a pie de Bastión de los pescadores y Castillo de Buda. Además, este ...
Disponibilidad
¿Cuándo quieres alojarte en Pest-Buda Hotel - Design & Boutique?
Descripción general
Ubicación del establecimiento
Si decides alojarte en Pest-Buda Design Hotel by Zsidai Hotels, disfrutarás de una magnífica ubicación en pleno centro de Budapest, a solo 15 minutos a pie de Bastión de los pescadores y Castillo de Buda. Además, este hotel se encuentra a 1 km de Puente de las cadenas Szechenyi y a 3,7 km de Isla Margarita.
Habitaciones
Te sentirás como en tu propia casa en cualquiera de las 10 habitaciones con decoraciones diferentes, equipadas con frigorífico y minibar. Las camas cuentan con colchones viscoelásticos y ropa de cama de alta calidad para descansar plácidamente. La conexión wifi gratis te permitirá estar al tanto de todo. Para tus momentos de ocio, tendrás una televisión LCD de 86 cm con canales por cable. El baño privado con ducha está provisto de cabezal de ducha tipo lluvia y artículos de higiene personal de diseño.
Servicios
Con una terraza donde descansar y comodidades como conexión a Internet wifi gratis y servicios de conserjería, ¡no te faltará de nada!
Para comer
Cuando quieras almorzar o cenar, solo tienes que pasarte por Pest-Buda Bistro, un restaurante especializado en cocina húngara. El alojamiento también cuenta con una cafetería y con un servicio de habitaciones con horario limitado. Se ofrece un desayuno a la carta todos los días con un coste adicional.
Servicios de negocios y otros
Tendrás check-out exprés, un servicio de recepción las 24 horas y atención multilingüe a tu disposición. Pagando un pequeño suplemento podrás aprovechar prestaciones como servicio de transporte al aeropuerto (ida y vuelta) disponible 24 horas y aparcamiento sin asistencia (de pago).
Datos de Interés
Las distancias se expresan en números redondos.
Plaza Vienna Gate: 0,2 km
Iglesia Matthias: 0,2 km
Capilla judía medieval: 0,3 km
Laberinto Castillo de Buda: 0,4 km
Bastión de los pescadores: 0,5 km
Hospital de la Roca: 0,5 km
Fő Utca: 0,7 km
Danube River: 0,9 km
Castillo de Buda: 0,9 km
Plaza Adam Clark: 1 km
Galería Nacional de Hungría: 1 km
Puente de las cadenas Szechenyi: 1 km
Palacio Real: 1 km
Funicular de la colina del castillo de Budapest: 1,1 km
Museo de historia de Budapest: 1,2 km
El aeropuerto más práctico para llegar a Pest-Buda Design Hotel by Zsidai Hotels se encuentra en Budapest (BUD, Aeropuerto Internacional Ferenc Liszt): 25,7 km
Información adicional
Check-in
Desde15:00hCheck-out
Hasta11:00hServicios
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Acceso a internet
- Wifi gratis
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Aparcamiento
- Parking
- Parking de pago
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Complementos habitación
- Recepción 24 horas
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Cuarto de baño
- Traslado de pago al aeropuerto
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Generales
- Bar
- Guardaequipajes
- Restaurante
- Zona fumadores
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Servicios
- Atención en varios idiomas
- Caja fuerte en recepción
- Express check out
- Información turística
- Servicio de conserjería
- Terraza
Opiniones del hotel
Basado en 345 comentarios
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Ubicación
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Calidad/Precio
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Habitaciones
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Limpieza
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Servicios
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Calidad del sueño
Comentarios destacados
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CialesRestaurante
Barrio tranquilo y hotel nuevoEstamos muy contentos de haber escogido este hotel para nuestra estancia en Budapest. El hotel tiene lo necesario para una estancia de fin de semana. Habitación con gran nivel de confort en cuanto a ducha, colchón muy grande y cómodo, TV enorme y habitación bien insonorizada. Muy buen desayuno y ubicación en el tranquilo barrio de Buda, a pocos pasos de la iglesia de Matías y el Muelle de los Pescadores. Repetiremos
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mperea195474
Un hotel muy agradable.Es un hotel encantador. La habitación es muy bonita y con estilo. Está en Buda. Fácil acceso con el 16 o 16A. Recomiendo este hotel por su localización y por su diseño. Lo recomiendo de verdad. Es original
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ferranher
PreciosoSitio muy bonito, habitaciones espaciosas y decoracion muy bien cuidada. El trato fue muy bueno, el servicio atento y nos ayudaron en todo lo que pedimos. En entorno es muy tranquilo, cerca del metro.
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maritxuleta
Un encanto de hotelEste hotel es encantador. Está en Buda, cerca del Bastión de los Pescadores y de la Iglesia de San Matías. Estuvimos en la Suite n 31, espaciosa, rústica, luminosa, con una bañera al lado de la cama, una cama kingsize con una iluminación fantástica con varios ambientes. Muy cuidado, con una ducha enorme y espacio para tomar una copa de champany o un café o simplemente descansar un rato. Volvíamos de pasear todo el día cansados y una bañera relajante hasta la hora de la cena hizo que la estancia fuera inolvidable. El desayuno es abundante y muy rico. El servicio fue muy amable y eficiente y en todo momento hicieron lo posible para hacer que nuestra estancia fuera de 10. El último día pedimos el desayuno en la habitación con una tarta de cumpleaños y champany y todo estaba perfecto. El primer día de estancia, al llegar, comimos en el Bistro del hotel y la comida estaba muy buena. Por la noche en Buda pudímos ir a varios restaurantes sin necesida de bajar a Pest. Recomiendo este hotel, y seguro que si volvemos a Budapest, repetiremos.
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marucabc
Mal trato.Me he alojado con mi pareja en este hotel del 1/3/2020 al 3/3/2020. Y, aunque el hotel es bonito y la comida de su restaurante deliciosa, no me han tratado PEOR en ninguno de los hoteles en los que me he alojado en mis 42 años. La excepción a esta apreciación es la atención recibida por el señor que nos atendía en el desayuno. No sé su nombre, pero gracias por poner la única cara amable de la estancia. Me he alojado en hoteles de gran lujo, en hoteles de lujo, en hoteles de 4 estrellas o incluso en albergues (donde me han tratado como aquí ya quisieran saber tratar al cliente), dependiendo de la experiencia buscada en cada ocasión. En el Meliá Génova; en el Villa Agrippina Gran Meliá, en Roma; en Casa Turire, en Costa Rica, en Gran Hotel Bahía Real, en Fuerteventura... en fin, que nunca me habían tratado tan mal, sinceramente. Nada más llegar, entramos por una de las puertas (hay dos y están una junto a la otra). Al parecer, por la que entramos es la del bistró. Nos dijeron que teníamos que ir a la recepción, a punto estuvieron de hacernos salir y volver a entrar por la puerta contigua, pero, finalmente, el señor que nos dio tan cálida bienvenida tuvo a bien girarse (la recepción era un mostrador compartido con la zona de hotel y de bistró). La habitación estaba pagada, a pesar de lo cual nos dijo que teníamos que hacer una preautorización bancaria casi del mismo importe pagado (cosa que hicimos, pero tela). Nos dieron una habitación que publicitan como con vistas al patio interior. Que no os engañen: no tiene vistas a ningún sitio. La habitación es preciosa, eso sí, pero lo que tiene es una puerta (puerta, sí) que abre a un pasillo y zonas comunes, con lo que no conviene abrirla, y que dispone de unas cortinillas plásticas (de las que se giran) si queréis intimidad. Luz por la noche váis a tener. Toda la que entra de las zonas comunes (habitación 15), por mucho que giréis las cortinillas. No tiene ascensor, por cierto. El baño no os va a permitir ninguna intimidad a la hora de hacer vuestras necesidades. Vuestro acompañante no os verá (son cristales al ácido), pero os oirá y tendrá visión directa. Después de acomodarnos, bajamos a comer. Era tarde (llegamos a las 16) y no nos pusieron ninguna pega (gracias). La comida os digo que es deliciosa. Al terminar, pedimos mapas. No tenían. Indicaciones, cero. Salí a fumar a la calle y salieron a decirme que me marchase a fumar a la acera de enfrente. El hotel está en la zona de Buda, os recuerdo. Si no vas con ello aprendido o no te lo cuenta alguien -qué menos que se preocupen los del hotel-, subes escaleras y cuestas como un condenado. Por la noche, intentamos cenar en el hotel. Intentamos, digo, porque no lo conseguimos. Nos pusieron mala cara, nos dijeron que podíamos tomar, a lo sumo, un postre, y todo ello de no muy buenas maneras. En su favor, diré que eran las 22:15 (según tripadvisor cierran a las 23, ya podrían cambiarlo). Aprendida la lección, bajamos a cenar al día siguiente a las 21:30. Había gente en el Bistró. Tampoco nos lo permitieron. Tampoco de buenas maneras. Que si lo tenían lleno (no era cierto), que si la cocina cerraba. El señor que nos malatendió hizo un paripé de oscar (con mala cara, ya digo). Bajó a cocina: que no; llamó a un restaurante -dijo, pero no estuvo ni dos segundos con el teléfono en la oreja- y nos dio pasaporte (no nos habríamos quedado ni aunque nos hubiera dado mesa ya). Total, que acabamos cenando a 50 metros, 21, se llama el sitio, peor pero MUY bien atendidos. Con cariño. Y eso no se paga cuando viajas. El colmo ha sido esta mañana, cuando a las 7:30 de la mañana han comenzado con ruido de taladros. Se han puesto a reformar la zona intermedia Bistró-Hotel, que es donde, además, tienen la máquina de café. El desayuno ha sido el fin de la peripecia. En fin, que desde luego no vuelvo ni, por supuesto, lo recomiendo a nadie. Tengo que decir también que en el check out les hemos informado de que habíamos consumido una botella de agua mineral del minibar y nos la han regalado. Gracias, les aseguro que habría pagado unas cuantas por tenerles como hotel de referencia en Budapest, lo que no ocurrirá si vuelvo. Mi agradecimiento al chef, que me ha permitido probar el mejor beef goulash en estos dos días. Y mis mejores deseos para el resto del equipo que gestiona este pequeño hotel. Van a necesitar suerte.