Les Alizés Beach Resort

Comentarios destacados

• tgimeno

  13 octubre 2013
  Un paraiso en Africa

  A primeros de abril de este año, despues de hacer un recorrido por Senegal llegamos a "Les Alizes Beach Resort Hotel" en Cap Skirring, Casamance. Un paraiso junto al mar. Nuestro viaje comenzó por el norte, en St. Louis una preciosa ciudad colonial y pesquera entre el rio Senegal y el mar. Las puestas de sol y la llegada de las barcas al caer la tarde, junto a la imagen de las mujeres trabajando en las salinas, nos quedarán en el recuerdo para siempre. De vuelte al sur hicimos noche el el Desierto de Lompul, donde dormimos en una jaima bajo la intensa luz de las estrellas. Tres dias en Dakar para visitar una ciudad popular y populosa. Mezquitas, mercados y playas. Volamos a Casamance,y en el Hotel Les Alizes encontramos un autentico oasis de paz, lujo, belleza y bien estar. Los bungalows con todo el confort y la cocina del hotel como una de las mejores de europa. Encantadores y atentos en el trato. A nuestro alrededor el Africa profunda con lindas aldeas escondidas entre la vegetación. Visitamos al rey de los Diollas, y el museo de su etnia en mitad de un bosque de Baobas y Ceibas, cada árbol era una sala.

  

• fpauber

  02 noviembre 2013
  Paraiso en Senegal

  Hemos pasado 4 días en este enclave paradisiaco, y la realidad supera con creces lo visto en internet. Sin duda es el n°1. Restaurante exquisito. Las suites son amplias y con todos los detalles que merece un 5 estrellas. El trato impecable, cercano, casi familiar y el entorno, verde, rodeado de flores... y la playa es única, exclusiva para los clientes, donde siestear bajo los cocoteros con la vista de km de playa de arena blanca y fina. No se puede pedir más. Los amaneceres son idílicos, cuyo silencio sólo es perturbado por el cantar de variedades de pájaros... Los propietarios se esmeran en que todo esté perfecto. A pocos minutos del hotel se pueden hacer muchas excursiones en canoa por los manglares, visitar poblados autóctonos, pescar, etc. La gente es amable y no hay ningún peligro en la zona... A 20 min. del hotel, paseando por la playa se puede ir a comer a la paillote, para variar.

  

• 910raquele

  20 abril 2014
  Simplemente Magnífico

  Una semana antes de Semana Santa, sabíamos que queríamos perdernos pero no dónde. Finalmente terminados eligiendo Gambia y Senegal. Difícil teníamos buscar un lugar con encanto, de relax y que fuera realmente bueno. Jamás imaginamos que acertaríamos de pleno en tan poco tiempo; Les Alizes Beach Resort, en Senegal. Llegamos por Banjul en un vuelo desde Gran Canaria, 2 horas y 25 minutos. Contratamos un transfer, un 4 x 4 con nuestro conductor Musa y 3 horas y media de carretera; recorrimos un paisaje maravilloso de selva africana, manglares, ríos y poblados espectaculares. La Frontera es un poco pesada, pero vale la pena porque lo que nos esperaba a la llegada en Cap-Skirring jamás lo olvidaremos. Nos esperaba Barbará en la puerta y su personal de recepción. Muy amables nos llevaron a lo que pensábamos sería nuestra habitación, ¡una casa de ensueño! Dos plantas más buhardilla con un techo de bambú espectacular. Las vistas hacia el mar impresionantes con toda la vegetación en su mayor esplendor. Fue todo un shock después del recorrido llegar a tan espectacular vista, estancia y servicio magnífico. Aún más fue cambiarnos y llegar a la cena y ver que más que un hotel, es una gran familia, sin agobios ni obligaciones. El servicio encantador se desvive por darte todo aquello que necesites. La comida fue toda una explosión de sabores con los productos de la zona, con toda tranquilidad pudimos comer de todo, de forma sana y segura. El personal Noa, Kevin, Robert, entre otros no hicieron pasar una semana inolvidable. Bárbara y Jean-Paul estuvieron pendientes en todo momento de todos los clientes. Los niños se lo pasan fenomenal, el personal está pendiente que se diviertan y los padres disfruten de las merecidas vacaciones. Para nosotros que nos fuimos solos, estar con niños fue también estupendo pues sin ser nuestros disfrutamos mucho de todos ellos. La playa es maravillosa, nos dimos larguísimos paseos todos los días. Han sido de esas vacaciones que cuando llegas a casa no sabes si fue real o lo has soñado. Enhorabuena a Bárbara y Jean-Paul por tan exquisita idea de crear un paraíso dentro de un paraíso. Javier y Raquel

  

• Rosa P

  23 abril 2014
  El paraíso existe

  Las tres ocasiones que hemos estado en Cap Skirring (Casamance, Senegal) nos hemos alojado en el Resort Les Alizes. En este entorno privilegiado, Bárbara y Jean-Paul, han sabido crear y administrar un beach resort excelente, que se caracteriza por un destacado equilibrio entre servicio, calidad y profesionalidad. Los niños disponen de unos maravillosos jardines, donde pueden desarrollar divertidas actividades al aire libre, siempre bajo la atenta mirada de Robert. Los adultos podemos disfrutar de una playa de película prácticamente desierta, donde se puede practicar deportes acuáticos, paseos interminables o interesantes excursiones para conocer la flora y fauna autóctona. Todos los miembros de una familia y resto de huéspedes tenemos nuestro lugar, pues existe un destacable ambiente de respeto y convivencia. La gastronomía es un punto muy destacable de este establecimiento, con una cuidada carta y una excelente bodega. El alojamiento se distribuye en un complejo de casas cuya estructura evoca las construcciones locales de la zona, pero con un interior amplísimo, distribuido en tres plantas y unos frondosos jardines. Les Alizes respeta la espectacularidad del paisaje de Cap Skirring, sin estridencias, con mucho confort. Es un destino para aquellas personas que buscan mucha tranquilidad y que aprecian que "menos es más" , siempre que se ofrezca calidad. Luis y Rosa

  

• marejadas

  23 febrero 2016
  Sitio fantástico

  El hotel es un paraiso, muy cuidado y precioso, con la playa a un paso, con muchas cosas que hacer y disfrutar. Han incluido una escuela de surf que funciona muy bien y fue un descubrimiento para nosotros, lo pasamos en grande. Repetiremos seguro.