La Posada de Babel

Comentarios destacados

• Pomba1234

  15 septiembre 2019
  Inmejorable

  Precioso, muy tranquilo, fácilmente accesible, y en el plano personal no sé puede ser más amable. El slogan de "Asturias paraíso natural" se cumple totalmente, si situación muy cerca de Llanes proporciona todos los servicios necesarios y deseables. Francamente recomendable

  

• MrPana

  17 noviembre 2019
  Lugares con encanto

  Empezamos por el personal, una pareja encantadora que se preocupa mucho de que tu estancia sea muy agradable. El sitio es espectacular, en medio de la naturaleza llanisca, rodeado de esos montes con los praos verdes que le dan ese color tan característico al norte de españa. y las habitaciones, con las vistas que tienen, y lo nuevas que son, nos han hecho sentir muy cómodos.

  

• sol f

  18 diciembre 2019
  lleno de paz y belleza

  el hotel es una casa con un diseño estupendo , en una finca arbolada a los pies de la imponente sierra , la tranquilidad está por todas partes , desde las habitaciones al salón y de la terraza al comedor , el jardín merece una visita con calma

  

• Gema P

  18 agosto 2020
  El mejor hotel al que volver

  En este hotel he estado cada vez que he visitado la costa oriental de Asturias, en diferentes etapas de mi vida, y siempre me ha parecido el mejor destino que se pueda tener. Cuando algo está bien pensado no le afectan ni las modas ni el paso del tiempo. Siempre se mantiene igual de espectacular y tranquilo. El mejor lugar donde pasar tus vacaciones y más en estos tiempos en los que necesitamos dosis de tranquilidad adicional. A ello contribuyen, además de Blanca y Lucas, Chus y Olga, que te hacen sentir como si estuvieras en tu casa. Destino para repetir, sin duda, una y otra vez.

  

• cawap68

  27 agosto 2020
  Relax total

  El hotel es singular: las habitaciones están distribuidas en diferentes construcciones de estilos modernos y separadas del edificio principal. La nuestra estaba en uno de 3, y daba a una pequeña riera, todo vegetación, y muy íntima. Lo mejor, una terraza cerrada pero toda ventanal: tomarse un vino ahí es relajarse absolutamente. La habitación no era muy grande, armarios suficientes, y el baño amplio. Como estás en plena naturaleza entran insectos etc, sin problema. El acceso de nuestra habitación no es directo, te dejan acercar el coche para descargar el equipaje. El desayuno es copioso, y te reponen lo que pidas. El servicio es súper amable y diligente, aunque la pareja gerente es un poco particular. No es barato, aunque destila exclusividad, que no lujo. Se paga el entorno. Yo lo recomiendo.