Kimpton Surfcomber Hotel

Comentarios destacados

• OskyC3

  04 noviembre 2019
  Hotel de south beach

  Fue una agradable estadía, buen servicio, limpieza y amable todo el personal. Algunas cosas faltan dado que cobran U$s 38 por un cargo de uso de las instalaciones y solo te dan 2 sillas o reposeras si vas a la playa, no importa cuantos miembros tenga tu familia, y el cargo aplica a cada persona.

  

• anasalmini

  21 noviembre 2019
  El lugar elegido!!!

  Es la quinta vez que elijo este hotel .Cada detalle de su decoración art deco y boho chic,la amplitud de sus habitaciones y espacios y la maravillosa vegetación de sus jardines hacen ese lugar único .Agradezco a Gabriel Vargas y a todo su equipo ,desde quienes estan en la puerta ,recepción ,y todos los que integran cada uno de los servicios del hotel son maravillosos!!!! Gracias por la atención que nos han brindado y volveremos!!! Un beso grande y nuevamente resalto que son los mejores!!!

  

• rafaelh681

  28 diciembre 2019
  Habitaciones incómodas

  La habitación en las fotos se ve muy bien Pero al llegar son mucho más pequeñas El baño es muy pequeño una mini tina que también es la regadera se ve sucio, Para el nivel del hotel están muy mal las habitaciones , eso si los blancos y las camas almohadas muy bien . Las instalaciones exteriores aceptables y la playa están bien ,solo que en la playa te cobran las sombrillas que son del mismo hotel cosa que no esta bien ya que la tarifa de por si es alta,no volvería a llegar a este Hotel.

  

• albertoibars

  13 abril 2020
  Generalidaes

  Exelente el sector piscina con un bar completo , y muy buena atencion, comidas muy ricas reposeras y tallas buenas. Degustación de vinos a las 17 hs. sin cargo. Regular la atencion en recepcion. No te atienden bien si no hablas ingles.

  

• AdrianCicculli

  31 octubre 2020
  EXCELENTE ATENCIÓN Y ESTADÍA

  El hotel impecable. Todo perfecto. Hasta el menor detalle cuidado. Lo mejor, la atención en el front desck de IVANNA!!!!, pendiente de todas nuestras necesidades y la gentilieza de los pool boys, siempre sonrientes.