Hotel Petit Cala Fornells

Comentarios destacados

• rebecamaarfil

  15 agosto 2019
  Hemos ido a pedir información.

  Hemos ido al Hotel Petit de Mallorca y mi primo le ha preguntado a la chica si podíamos comer ahí pagando y usar la piscina, y la chica a respondido que se podía comer, pero que la piscina era exclusivo para los clientes, y quien le había dicho eso con prepotencia y chulería, un antiguo trabajador de ese hotel nos a dicho que si se podía y le dice la chica sabes su nombre y dice no sé su nombre que si se había colgado el año pasado que este no, la chica dice ir a preguntar al jefe, mi hermano y yo hemos ido arriba y el señor simpático nos ha dicho que comer si, pero la piscina era para los clientes, y nos hemos ido. Al bajar la señora se acerca a la barandilla de hotel y se nos pones no a habido suerte con chulería y prepotencia, le ha empezado a decir que en ese hotel no querían chusma porque era de 5 estrellas, que era un inútil, un niñato que venga que no se había podido colar, que se fuera a colar a otro sitio. No a tenido vergüenza en decir todo eso delante de los clientes que estaban sentados, mi primo harto de que le juzgaran le a respondido con las palabras del vídeo, por pedir que si podía comer ahí pagando que le a dicho pagando que no le a dicho nada de otro mundo, le a juzgado por llevar tatuajes también. No juzguéis a la gente por su forma de vestir, ni por los tatuajes que lleven en su piel. La camarera se llamaba Yolanda. Tenemos un vídeo donde lo confirma.

  

• rebecamaarfil

  15 agosto 2019
  Hemos ido a pedir información

  Hemos ido al Hotel Petit de Mallorca y mi primo Pedro le ha preguntado a la chica si podíamos comer ahí pagando y usar la piscina, y la chica a respondido que se podía comer, pero que la piscina era exclusivo para los clientes, y quien le había dicho eso con prepotencia y chulería, un antiguo trabajador de ese hotel nos a dicho que si se podía y le dice la chica sabes su nombre y dice no sé su nombre que si se había colgado el año pasado que este no, la chica dice ir a preguntar al jefe, mi hermano y yo hemos ido arriba y el señor simpático nos ha dicho que comer si, pero la piscina era para los clientes, y nos hemos ido. Al bajar la señora se acerca a la barandilla de hotel y se nos pones no a habido suerte con chulería y prepotencia, le ha empezado a decir que en ese hotel no querían chusma porque era de 5 estrellas, que era un inútil, un niñato que venga que no se había podido colar, que se fuera a colar a otro sitio. No a tenido vergüenza en decir todo eso delante de los clientes que estaban sentados, mi primo harto de que le juzgaran le a respondido con las palabras del vídeo, por pedir que si podía comer ahí pagando que le a dicho pagando que no le a dicho nada de otro mundo, le a juzgado por llevar tatuajes también. No juzguéis a la gente por su forma de vestir, ni por los tatuajes que lleven en su piel. La chica se llama Yolanda. Tenemos un vídeo

  

• Ljlbcn

  27 agosto 2019
  Remanso de Paz

  Hemos ido a pasar un par de días y hemos descubierto una joya. Somos de Palma y principalmente buscábamos paz y tranquilidad, sin duda este Hotel reúne las condiciones perfectas para escapar de la rutina y mimarte. Las habitaciones de ensueño,vistas increíbles, el desayuno casero y buenísimo. Decidimos probar el restaurante, y comimos bien, pero sin duda marcó la diferencia el servicio 10/10. Volveremos

  

• juanmJ2433NR

  02 marzo 2020
  Mi cumpleaños

  Fue un verdadero y grato descubrimiento... Fue mi cumpleaños y nos alojamos mi pareja y yo en este hotel.. La verdad estoy muy contento por la habitación el detalle de bienvenida y la atención prestada... Gracias petit cala Fornells cumplir un año más a vuestro lado es un lujo.. Espero repetir el año que viene un cordial saludo y enhorabuena.

  

• AliciaSeptiembre

  09 agosto 2020
  Estancia inolvidable.

  Febrero 2020. Poco antes del estado de alarma, así que fue casi como viaje de placer con sabor a despedida antes del encierro (sin saberlo). El personal del hotel fue SUPER AMABLE, explicándome rutas de senderismo y parajes para caminar la isla, que es lo que yo buscaba. Las cenas con ajustado horario alemán (menos mal que era febrero y venia cansada de caminar), eran como estar en un crucero de lujo, viendo la bahía en calma y las luces de los barcos fondeados. Exquisito menú y bufete que cada noche sorprendía más. Un hotel muy cuidado, tranquilo, en un entorno natural muy mallorquín, con unas vistas que llenan de paz, y sobre todo, en manos de personal muy profesional y amable. Lo recuerdo con mucho cariño. Quiero volver.