Hotel Keizershof

  • Hotel
  • 3 Estrellas

Keizersgracht 618, 1017 ER Amsterdam

Valoraciones

4.5 sobre 5

Basado en 330 comentarios

  • Ubicación

    5.0 sobre 5
  • Calidad/Precio

    4.5 sobre 5
  • Habitaciones

    4.5 sobre 5
  • Limpieza

    4.5 sobre 5
  • Servicios

    4.5 sobre 5
  • Calidad del sueño

    4.5 sobre 5

Descripción

Ubicación del establecimiento Hotel Keizershof está en una fantástica zona de Ámsterdam (Ámsterdam centro), a solo diez minutos a pie de Rijksmuseum y Leidseplein. Además, este hotel se encuentra a 0,8 km de Heineken Experience y a 1 km de Museo Van ...

Disponibilidad

¿Cuándo quieres alojarte en Hotel Keizershof?

Descripción general

Ubicación del establecimiento
Hotel Keizershof está en una fantástica zona de Ámsterdam (Ámsterdam centro), a solo diez minutos a pie de Rijksmuseum y Leidseplein. Además, este hotel se encuentra a 0,8 km de Heineken Experience y a 1 km de Museo Van Gogh.

Habitaciones
Te sentirás como en tu propia casa en cualquiera de las 6 habitaciones. Mantén el contacto con los tuyos gracias a la la conexión a Internet por cable gratis. El cuarto de baño está provisto de ducha y artículos de higiene personal gratuitos. Entre las comodidades, se incluyen cafetera y tetera y botella de agua gratuita, además de un servicio de limpieza disponible todos los días.

Servicios
Con jardín donde descansar y comodidades como conexión a Internet wifi gratis, ¡no te faltará de nada!

Servicios de negocios y otros
La recepción tiene un horario limitado.

Restauración
Este alojamiento permanecerá cerrado desde el 8 de agosto de 2024 hasta el 8 de agosto de 2025 (fechas sujetas a cambios).

Datos de Interés
Las distancias se expresan en números redondos.

Keizersgracht: 0,1 km
Reguliersdwarsstraat: 0,5 km
Rokin: 0,5 km
Kalverstraat: 0,5 km
Mercado de las flores: 0,6 km
Plaza de Rembrandt: 0,6 km
Rijksmuseum: 0,6 km
Universidad de Ámsterdam: 0,6 km
Sala Paradiso: 0,7 km
Christmas Palace: 0,7 km
Las 9 calles: 0,8 km
Leidseplein: 0,8 km
Plaza de los Museos: 0,8 km
Nes: 0,8 km
P.C. Hooftstraat: 0,8 km

El aeropuerto más práctico para llegar a Hotel Keizershof se encuentra en Aeropuerto de Schiphol (AMS): 16,7 km

Información adicional

Check-in

Desde15:00h

Check-out

Hasta11:00h

Servicios

  • Acceso a internet

    • Wifi gratis
  • Generales

    • Jardin
  • Servicios

    • Recepción (horario limitado)

Opiniones del hotel

4.5 sobre 5

Basado en 330 comentarios

  • Ubicación

    5.0 sobre 5
  • Calidad/Precio

    4.5 sobre 5
  • Habitaciones

    4.5 sobre 5
  • Limpieza

    4.5 sobre 5
  • Servicios

    4.5 sobre 5
  • Calidad del sueño

    4.5 sobre 5

Comentarios destacados

  • chemarey

    Lo mejor la atencion familiar y la ubicacion

    El Hotel es bastante normal, mas bien es un B&B. El negocio debe llevar muchos años funcionando, como queda patente en el estado de sus instalaciones, desgastadas por el paso de los años. Por lo menos, las habitaciones estan limpias. Es un lugar tranquilo, si no tienes vecinos en el piso de arriba, si los tienes, puedes sufrir el ruido del crujir de las maderas del suelo. Mediante este ruido sabes perfectamente en que lugar de la buhardilla se encuentra tu vecino y eso a las 7 de la mañana puede resultar bastante molesto. Lo mejor sin duda es el trato de la Señora de la casa siempre atenta a tus deseos a la hora del desayuno, muy abundante y sabroso. También la localización es muy buena, esta entre los museos y la plaza Dam, de manera que puedes ir caminando a todas partes. Creo que este alojamiento, para una escapada de fin de semana puede estar bien si tu presupuesto es ajustado, sobre todo viendo los precios que tienen los Hoteles en Amsterdam. Pero hay que tener en cuenta que de Hotel, no tiene mas que el nombre.

    3.0 sobre 5
  • ninamoustache

    Lo mejor de Amsterdam

    Hemos venido tres días a Amsterdam y no hay mejor sitio que instalarnos aquí. Lo primero destacar la amabilidad de esta familia, siempre están dispuestos para ayudarte y con mucho sentido del humor. Delicioso desayuno!!! La ubicación es excelente estás en medio de todo, 15 minutos barrio rojo y 10 min Plaza Dam. Gracias por estos dias! Un abrazo Maria!

    5.0 sobre 5
  • LaiaFM

    Hotel cèntrico, atención espléndida

    Nos alojamos a principios de abril con nuestra hija. El hotel es un edificio ubicado delante del canal Keizersgratcht. En la planta baja està la cocina y el comedor donde se sirven los desayunos, y al mismo tiempo es la cocina y sala de estar de la familia que lleva el negocio. La mesa del desayuno es una única mesa donde se van sentando los huespedes del hotel, es genial poder conocer gente del resto del mundo. Los propietarios, tanto Ernest como Hanneke, son amabilisimos, te hacen lo que les pidas para desayunar, tortitas, tortilla, el pan era delicioso, queso, fruta que te puedes llevar para comer durante el dia....genial! También te ofrecen botelines de agua. La primera planta está ocupada por un negocio, y las siguientes 3 plantas por habitaciones del hotel. Nosotros nos alojamos en la bajo cubierta, en una habitación con ducha y wc en el interior. Con vistas al museo Rembrant. La cama muy comoda y aunque austero, todo estava muy muy limpio. Le pusieron una cama a nuestra hija. La habitación dispone de nevera. El hotel se encuentra a 5 minutos andando de las zonas más turisticas, y puedes coger el tranvia a dos calles de alli. La zona es tranquila pero a dos calles de alli tienes infinidad de restaurantes para elegir. El único problema que puede tener el hotel, aunque no en nuestro caso, son las escaleras, que son altas y estrechas, de caracol. Mi hija las subia sin problemas, y dejabamos el carrito abajo,pero si se tiene algun tipo de discapacidad seria complicado. Los dueños os explicaran cualquier cosa que necesiteis en cuanto a Amsterdam. Sin duda si volvemos a Amsterdam, repetiremos! Ernest, gracias por el pañuelo bordado que le regalasteis a mi hija!

    5.0 sobre 5
  • BookDude

    Perfect, as long as you can do the stairs!

    The DeVries familymatriarch Mary, along with her daughter Hanneke and son Ernestare the hosts at this hotel, which feels more like a comfortable bed-and-breakfast. The building dates from the 17th century and maintains many of the architectural features of that time, including narrow, steep staircases to access the guest rooms, none of which are on the ground floor. As long as you understand that there is no lift and that the treads on the stairs are narrow and require agility to climb, especially with luggage in hand, then you will enjoy your stay here. If you cant accept climbing steep stairs, you will be better off booking a more traditional lodging. The many rewards for accepting the stairs include clean, spacious, and quiet rooms; a convenient location within easy walk of tram lines and the Rijksmuseum; and, most of all, the hands-on care and oversight of the DeVries family, especially Hanneke, who presides over the morning breakfast (included in the room rate) and takes care of many little details for her guests. The breakfast room on the ground floor has a long communal table where guests gather to enjoy a generous buffet of cold meats, cheeses, freshly baked bread, pastries, fruit, cereals, and yogurt, accompanied by orange juice and unlimited pots of strong coffee (Ernest makes a hearty brew!). The hotels web site doesnt handle credit-card bookings in the usual way. It offers a form which people can submit to indicate their room preferences and their dates of arrival and departure. From that point, reservations are made and confirmed through e-mail communication with Hanneke, who made the process very easy for us and was prompt in replying to any questions we had. (FYI: the hotel prefers payment in cash, so plan accordingly. Your credit card number will be used simply to hold the room and guarantee the reservation, but it will not be charged.) In our e-mail communications with Hanneke, she described the hotels various rooms and their location in the building. Wanting to minimize the number of stairs we had to climb, we reserved the Raefje room, which involved only one spiral staircase. The room was large and comfortable, with a walk-in shower, plenty of hot water, an electric kettle with an assortment of teas and coffees, and a magnificent Delft-tiled fireplace: an ornate and beautiful reminder of the buildings history. The room overlooked a lovely garden and was quiet at all hours of the day and night. The small toilet cubicle was located on the landing, just outside the door of the room, and some people might find this a bit awkward. We arrived in Amsterdam on a Delta Airlines flight which landed at the dark hour of 6 AM, and we took a train from Schipol Airport to Amsterdam Centraal station, and then a tram to the hotel, arriving around 8 AM. Weeks earlier, we had alerted Hanneke of our early arrival, and she told us that we could leave our bags with her and explore the city for a few hours until our room was ready. When we arrived at the hotel and rang the doorbell, Hanneke warmly welcomed us inside and graciously asked us if wed like to sit down to breakfast, which had been set out for the other guests who had already spent the night. We were famished and gladly accepted her invitation to have a full breakfast and an opportunity to get to know her, after which we did spend the day wandering Amsterdam on foot. Returning to the hotel in the afternoon, we found that Ernest had already carried our bags to the room, so we didnt have to carry luggage on the stairs until the day we checked out. After traveling beyond Amsterdam for a few weeks, we returned to the Hotel Keizershof for a two-night stay before flying home from Schipol Airport. Hanneke had promised us that we could have the same room we had stayed in a few weeks earlier, but upon our arrival, Mary announced that she had made a mistake with the booking and that we would have to take a different room for only one night. This room was on the very top floor and required ascending THREE flights of stairs, but we managed it for just the one night. This top-floor room was called the Rita Hayworth room and was even more spacious than the Raefje room which we had occupied before. The bathroom alone was easily three times the size of the bathroom in the Raefje room. We loved this room and would have stayed in it for the last night, had it not been for the stairs. We were very glad when Hanneke moved us back into Raefje. We paid 150 per night for each of the five nights we stayed at the Hotel Keizershof, and we thought it to be a very good value, considering the hotels prime location, the ample and diverse breakfast, and especially for the daily conversations with Hanneke and her family, which certainly enhanced our stay and gave us a taste of true Dutch hospitality from a delightfully friendly Dutch family.

    5.0 sobre 5
  • Gillian G

    We loved the place and the hospitality was second to none!

    This is a well-located establishment near to museums and the centre of Amsterdam. We walked easily to the Anne Frank house and Van Gogh museum. The hosts in Hotel Keizershof were fantastic. Each morning we had a delicious breakfast with omelette cooked for us and we were given water to take out with us. There was a very good variety of food to choose from at breakfast - certainly something for everyone. Hanneke looked after us with good humour and positivity. She recommended that we visit the local Art Deco cinema which was a real treat! The room suited us perfectly. I would return to this hotel again if only for the wonderful hospitality.

    5.0 sobre 5