Hotel Goldene Rose

Comentarios destacados

• Panci29

  19 agosto 2015
  Hotel en casa tradicional alemana

  Cuando llegamos a Dinkelsbühl nos quedamos maravillados...el hotel está en pleno centro del pueblo! Las habitaciones cómodas y limpias, sin aire acondicionado, pero eso pasa en todos estos tipos de hoteles. No pasamos excesivo calor. El desayuno muy rico y con variedad, pero hay que recordar que no son hoteles de grandes cadenas, sino casi todos familiares por lo que encontraremos comida casera variada y muy rica. El edificio es realmente precioso y de cuento. Tranquilo y cómodo.

  

• Martín B

  19 enero 2016
  Excelente ubicación! Muy lindo edificio

  Estuvimos en Octubre 2015. El hotel está en una ubicación clave para poder recorrer todo a pie. El edificio es realmente antiguo y está muy bien conservado. La atención fue correcta. Si bien la entrada coincide con la del restaurante eso no representó ningún problema. Es súper recomendable. La ciudad es bellísima. En esa zona está lleno de restó y negocios.

  

• Marialisfs

  03 abril 2016
  De paso!!

  nos alojamos una noche en nuestro recorrido por la ruta Romantica, esta en el corazón de Dinkelsbuh, pueblo de sueños!!! con wi fi .buena relación precio calidad! Tiene restó en el que se come muy bien, pero el personal es poco amable! De todos lo recomiendo!

  

• 242melinal

  15 octubre 2017
  Hotel con historia

  El hotel tiene bastante antigüedad pero esta bien conservado. La habitación que nos tocó era chica y el baño también. Esta frente a la iglesia y a las 6 am suenan las campañas y no hay forma de que no las escuches. El desayuno está bien.

  

• kgorongoro

  28 diciembre 2017
  Si quieres dormir rodeado de historia este es el sitio

  A veces uno se encuentra con "cosas" especiales, en este caso de casualidad en nuestro itinerario turístico por la ruta romantica, la cual recomiendo y mucho, encontramos al llegar a este pueblo la plaza central cortada por la celebración de fiestas populares. Detuvimos el coche y se nos acercó un vecino ataviado con su traje medieval y con unas cervezas de más. Nos pregunto que haciamos allí y que buscabamos, reconoció la matrícula española del coche y le trajo recuerdos de su visita a España. Además de recurrir a nuestra App para buscar hotel este vecino muy voluptuoso fué a preguntar al hotel, nos acompañó al mismo y con la alegría desbordante que se vivía no pudo ser más agradable el contacto con este pequeño pueblo llamado Dinkelsbuhl que recomiendo visitar. Nos dirigimos a la recepción con una vista exterior del establecimiento imponente y tradicional rebosando historía por todos lados y con una decoración medieval no vista antes. Enseguida un muchacho nos ayudó con el equipaje y después de preguntar precios nos enseñaron una habitación con posibilidad de elegir ente varias la que mas nos gustara. Impresionante escalera de madera que por el paso del tiempo está inclinada hacia el interior según subes con un amplio dsitribuidor que da a las habitaciones. Todo decorado en estilo medieval que más que decoración hecha me parece que es el resultado de todos los años de historia que rodean el establecimiento. A la mañana siguiente en un cartel municipal al lado del hotel (según sales a la izquierda al llegar a la esquina) en el que se hablaba de los usos que tenían este edificio donde al parecer hasta durmió Carlos V de Alemania que como todos sabemos también fué Carlos I de España; increible desde todo punto que durante quinientos años este edificio haya cumplido la misión de dar cobijo a los viajeros y emocionante al mismo tiempo. La habitación con muebles antigüos como de pueblo y la cama cómoda en este punto se puede abrir el debate de si es mejor incorporar la modernidad o dejar "anclado" en el tiempo todo tal como está. En mi opinión prefiero una habitación limpia que mantenga "sabor" que la incorporación de todo lo que hoy entendemos como modernidad. Noche muy agradable, gente lugareña muy agradable y la habitacion con vistas a la plaza prinicipal con las campanas de la iglesia que te despiertan por la mañana (hay a quién no le gustará, pero a mi me encanta). A la mañana siguiente sorpresa, un desfile medieval en toda regla bien ordenado y todo el mundo vestido con ropas de otra época. Muy interesante y agradable todo. Tan entusiasmados estabamos que pedimos cenar en el restaurante del hotel y repetición de la jugada, estupenda decoración aunque algo más modernizada y trato super estupendo, recomendandonos, atendiendonos y en una mesa con ventanitas al lado para ver el centro neurálgico del pueblo que luego recorrimos, no es muy grande pero seguro os "transportará" a otra época. Recorrer la ruta romántica en coche parando donde os apetezca a comer, dormir o tomar cualquier cosa y hacerlo sin prisas; merece la pena y luego podreis conectar con la ruta del Mossela de la cual en algún otro artículo hablaré. Muy recomendbale. Además si vas en coche tienen parking en edificios colindantes.