Hostellerie de la Bouriane

Comentarios destacados

• Osman3

  16 agosto 2011
  En general bien, y dos críticas a la gestión.

  Pasamos cinco noches desde el cinco de agosto en La Bouriane. Está situado en una zona muy tranquila de fácil aparcamiento y muy cerca del centro del pueblo. Gourdon es un pueblo encantador y una buena base para realizar excursiones por el espléndido Quercy. Las habitaciones están limpias, confortables y bien amuebladas. La calidad del restaurante es estupenda. El desayuno nos pareció corto para el precio de 13 euros, con café, leche y zumo, bollería, pero sin huevos, patés, jamon dulce o quesos. Hubo dos cosas que no nos gustaron. Tratamos de entrar a la habitación para descansar a las dos de la tarde y nos encontramos el hotel cerrado a cal y canto, sin manera de acceder al mismo. Al cabo de un rato de dar vueltas se asomó una mujer del servicio por una ventana y nos susurró una clave numérica para entrar por una puerta lateral. Ésta dá acceso a un amplio jardín posterior y a una puerta que conduce a las escaleras que conducen a las habitaciones. La recepción cerrada con nuestra llave dentro obligó a las empleadas a abrir con llave maestra. Lo sentimos, pero la recepción cierra entre 12 y 15 horas Es la primera vez que me ocurre que un hotel está cerrado tres horas en el centro del día y no tiene quién lo atienda en plena temporada alta. Allí coincidimos con un grupo que llegaba de viaje para hacer su entrada y montaron en cólera. El segundo problema consiste en que suelto en el jardín posterior se encontraba un perro de unos ochenta kilos y un metro de alzada que nos hizo frente ladrando plantado a un metro de nosotros. Excuso decir que me asusté. El animal suelto no me animó a visitar el jardín. Curioso que en la puerta de acceso al jardín trasero hay un cartel de aviso sobre el perro, donde dice que uno entra consciente de su presencia y bajo su responsabilidad. En realidad el propietario no te deja otra opción. Al día siguiente debieron advertir al propietario de nuestro malestar y este acudió a facilitarnos un papelito con la clave y recordarnos que sería bueno que nos marcháramos con nuestra llave mazacote de bronce. Le pedí explicaciones sobre el perro suelto y me dijo que no tenía quejas, que era muy bueno, incapaz de hacer daño, que seguramente mi larga barba blanca no le habría gustado. ¡¡¡ ¡!!. Al día siguiente lo soltó por la noche en la terraza que dá acceso a la entrada principal, entiendo que para demostrar su carácter bondadoso. No encontró motivos para disculparse. Por si le es de utilidad a alguien.

  

• atochadealos

  16 septiembre 2011
  Aceptable pero sin excesos

  Hotel bien situado dentro del pueblo, con bonitas vistas y en un edificio con encanto. Personal amable (el del comedor, especialmente servicial) y perro imponente. Luego resultó ser muy simpático pero solo despues de vernos con el dueño. De las dos habitaciones que reservamos una de ellas era realmente pequeña (dos personas nos chocabamos continuamente) y con la decoración y el mobiliario algo anticuados. La otra estaba mejor, algo más amplia y bonita. Baños un poco ajados pero con un lavado de cara aceptable y geles y jabones apetecibles.La limpieza, bien. Restaurante muy bueno y agradable para cenar.

  

• William L

  02 mayo 2019
  Never fails to please

  We have dined at this lovely old restaurant numerous times over the last 11 years, and it has never let us down in any way. The dining room is comfortably elegant and old-fashioned with fringed lamps and antique furniture and a gas fireplace. The waiter, a veteran of many years, is the perfect server and gentleman. He is friendly without being familiar. He knows the menu and the preparations perfectly. The chef is masterful, serving very traditional dishes, classically prepared and delicious with very attractive presentations. The wine list is very impressive with excellent prices. The feeling is "old France" without being tired or faded. More like a step back in time. By the way, I had the fricassee of sweetbreads and kidneys with morels in cream sauce--a must if you love those things which are not so easy to find anymore. There are plenty of other choices for those who don't want that dish. The hot souffle of prune liqueur is heavenly, and out dining companions attested to the sublime taste of the chocolate and orange dessert. Prices are quite reasonable for the high quality and generous portions. I highly recommend this lovely family-run establishment.

  

• ericelliott251

  27 julio 2019
  Short stay hotel

  This is the perfect hotel to stay for a few nights and as a base for discovering the northern Lot. Family owned and run for many years,the bedrooms are exceptionally clean and well maintained , if on the small side whilst the quality and standard of food is exceptional with an extensive and good value wine list. Highly recommended.

  

• TonyB759

  11 agosto 2019
  Magnificent - traditional French excellence!

  We enjoyed our stay very much and can safely recommend. It is increasingly rare to discover a long standing family run restaurant and hotel. The husband and wife team are completely on top of their game. Our dinner was outstanding. Wine list is extensive and very carefully selected. Service is high order professional with a twinkle and great humour lurking just below the surface. Altogether most enjoyable and good value.