Hostal de la Luz - Spa Holistic Resort

Comentarios destacados

• Sara2366

  10 agosto 2020
  En tiempo de COVID

  Siempre hemos disfrutado el Hostal de la Luz, somos frecuentes. Quisimos escaparnos por una noche de domingo a lunes a Tepoztlán y escogimos el Hostal. Fue una total decepción en tiempo de COVID por varias razones. Para empezar en la recepción la Srita. y todo el personal del hotel traen únicamente cubrebocas y no portan careta. Tiene su acrílico entre cliente y personal sobre el escritorio y nos atendió al lado del acrílico. Tienen un desinfectante de las maletas y si gustas te metes ahí mismo. A nosotros no nos lo sugirieron siquiera. El cuarto al que siempre llegamos, estaba muy maltratado y bastante sucio. Tuvimos que pedir lo limpiaran y nos salimos por media hr antes de siquiera desempacar en lo que lo limpiaron. Es una tristeza, el lugar está muy abandonado, ni siquiera barridas las escaleras. Las plantas muy descuidadas, triste... Parecería que los dueños del hotel, no han ido por ahí y no han enseñado a su personal "la nueva manera" de recibir y proteger a los huéspedes. En el restaurante los meseros son amables, traen su cubrebocas, aunque algunos cubrebocas ya arreglados con nudo. No les han dado careta y me imagino que tampoco cubreboca y cada quien trae el suyo de casa. Esta vez la comida no estuvo tan buena como siempre, deseo vaya tomando sabor nuevamente. El Hostal de la Luz es un lugar amable tranquilo y hermoso. Ojalá tomen las medidas necesarias para hacernos sentir seguros al visitarlos y puedan dar nuevamente la calidad que ofrecían antes.

  

• Q6826LIalfredoc

  26 septiembre 2020
  El mejor lugar

  Me hospede en hostal de la Luz fue la experiencia más increíble, el trato del personal excelente, las instalaciones muy cómodas y con todas las medidas de higiene necesarias es súper recomendable, nuevamente mil gracias por todo.

  

• Laura2163

  29 septiembre 2020
  Realmente no es lo que te ofrecen

  Tristemente te ofrecen un gran paraíso y no es así, no hay wife en todo el hotel, eso si la comida deliciosa, muy poca variedad, lo único sobresaliente fueron los meseros, del sobre todo Jair, muy amables, tomamos un masaje disque por 30 minutos y FATAL! No te dan realmente lo 30 minutos, según esto todos masajes sin iguales y pues gran desilusión , muy malos, las chicas con Mala actitud y Si se de masajes soy experta ya Que de masajes siempre los tomo dónde voy. otra es que tú salida es a las 12:30 del día!, entonces pues te levantas te tomas fotos desayunas rápido, porque ni tiempo te da de disfrutar, tuve la mala fortuna de pagar una cama extra y parecía piedra , la chica de recepción de turno de tarde noche, muy grosera, pensé que sería una buena escapada de relajación y fue todo lo contrario, caro y está lejos del pueblo de tepoz.

  

• PaulaC897

  03 noviembre 2020
  Descanso total con total desconexión

  Es cierto: no hay televisión en ningún lugar del hotel y sólo conexión a wifi en la recepción, en el restaurante y en una zona de terrazas. Pero todo está bien explicado en la página del hotel. Para mí, fue un paraíso. Justamente lo que estaba buscando: sol, alberca y disfrutar tardes en la hamaca leyendo un buen libro. El hotel tiene la bendición de la naturaleza: han sabido aprovechar la geografía que naturalmente les ha dado Natura. Estuve alojada en el sector de las "carpas" o "tiendas". Realmente maravilloso. Son literalmente carpas, con aire acondicionado y un baño completo y amplio. Lo espectacular: la vista de la cadena montañosa, que casi se puede tocar con las manos y la alberca (piscina) semi privada, al pie de la terraza. Se nota que es un área nueva del hotel. Igualmente, cada zona de habitaciones cuenta con su alberca semi privada. Donde pueden mejorar? En la cocina, definitivamente. El desayuno buffet bastante escaso de opciones, por tratarse de un fin de semana largo. Un área de oportunidad interesante: al pasar y sin detenerme demasiado, vi un limonero, un árbol de guayaba y un ciruelo. Pregunté si hacían algo con los frutos. Nada! Podrían preparar sus propias mermeladas y hasta incluso venderlas! (la mermelada que me sirvieron era de supermercado). Hacen falta más opciones veganas y/o vegetarianas e incluir más preparaciones típicas o novedosas y que se note "la mano" una cocinera/ro de la zona, que deben abundar. Los cuidados referidos a la pandemia, bien. Todo el personal portaba su máscara y cada huésped podía optar por utilizarla o no en las piscinas y restaurant. En zona de spa y actividades grupales era obligatorio el uso. Creo que incluyendo mejoras en el área de alimentación podrían estar un nivel más allá. Volvería indudablemente. El entorno no tiene precio, a 1 hora y media de la CDMX.

  

• GabriellaMC

  21 noviembre 2020
  Personal deficiente e instalaciones viejas; gran SPA.

  Es un hotel muy bonito y lo están ampliando, pero las zonas nuevas son las que valen la pena, porque las de hace 15 años ya lucen descuidadas porque no le dan mantenimiento adecuado... Noté en mi cuarto, Huayna Picchu que el piso era de alfombra (muy 90s, eso es anti higiénico y más en tiempos de Covid19); el baño olía a caño y las cortinas tenían ganchos que se desajustaban, además de que había humedad en la herrería de las ventanas... No tengo fotos porque estaba en viaje de trabajo y tuve poco tiempo y menos pila de teléfono. Pero eso no es nada frente a la atención deficiente del personal de recepción (que nunca está, a mí me atendió una señora del aseo por ayudar) y de los meseros, que no saben nada... Yo iba con una compañera de trabajo (por Covid nos dividieron a un grupo grande en pequeños duetos); al hacer check-in no nos informaron lo que incluía el paquete pagado; le preguntamos a los meseros y tampoco sabían, pero al firmar los vouchers con cargo a la habitación no dividieron las cuentas de cada huésped a su respectiva habitación, lo cual causó problemas al salir. También son excesivamente lentos y hay que estarles recordando los pedidos. Al comunicarnos con la empresa que pagó el viaje nos enteramos que estaban incluidos ciertos servicios que la recepcionista nos cobró aparte. Cabe decir que las notas del restaurante eran comandas escritas a mano, como de fonda y no de resort de lujo, como se vende el hotel. Por último, al señalarles los cargos adicionales a la recepcionista, salió el gerente a regañarnos con mucha hostilidad y hasta arrojó sobre el desk el documento de la empresa que pagó. Le dije que eso debía haberlo mostrado a la llegada y no a la salida. Ah, y no le habían colocado a mi compañera un obsequio de cortesía que nuestra empresa pagó y tuvimos que pedirlo; adicionalmente el bell boy tomó mi maleta de la palanca flexible (que no rompió porque yo intervine) y no de la asa propia para cargar. Es un detalle insignificante, pero después de todo lo que hicieron mal me hace pensar que si no saben sujetar el equipaje, menos van a saber atender clientes de negocios... No lo recomiendo como hotel ni restaurante, aunque a decir verdad la comida es excelente. Por cierto, que las mesas son de cafetería, por lo tanto son muy pequeñas y no aptas para ejecutar las medidas de sanidad entre dos comensales de 1.5 mt de los protocolos Covid19 (que no todos vamos de luna de miel). Deberían invertir en remodelar el lugar y comprar nuevas mesas más amplias, o bien, no ofrecer el hotel para grupos de negocios porque no tienen la capacidad y la pericia para ello. Lo único súper recomendable y con excelente atención es el SPA, con su piscina de hidromasaje de cuarzos para alinear los chakras. Incluye espumoso de cortesía y usan productos Natura Bisse; es especialmente buena y amable Mairelle. Déjenle buena propina, la merece. Los demás no.