Herdade da Malhadinha

Comentarios destacados

• Picott

  13 octubre 2013
  Muy recomendable

  Es un hotel pequeño, elegante, lleno de detalles, con un personal extraordinariamente amable, educado y eficiente. Se halla en un entorno bellísimo, con una más que notable bodega. El desayuno fabuloso, y el restaurante excelente. Por los paisajes, las actividades, los servicios, el trato y las instalaciones vale muy mucho la pena. No es barato, pero semejante nivel tiene su coste.

  

• Elena_Guisado

  01 septiembre 2014
  Días en paz

  La Herdade es una maravilla, súper bien cuidada y con una decoración y un gusto exquisito. Las habitaciones son grandes y muy cómodas. Todos los días hay flores y frutas frescas. Dispones de un iPod con un altavoz para uso propio, El personal es encantador y muy amable, el desayuno es absolutamente maravilloso y súper abundante. La única pega: el wifi: En las habitaciones no hay. Y el precio de los restaurantes comer o cenar allí es bastante caro y aunque el chef del restaurante es muy conocido, comer en la zona de la piscina es muy caro y no merece la pena.

  

• Hectoragus

  15 septiembre 2014
  Lujo en pleno campo

  Estuvimos 4 dias en el mes de Julio, y la experiencia de pasar unos dias en esta Herdade fue espectacular. El hotel es de pocas habitaciones y con todo lujo de detalles, las suites son amplias,cómodas y con una decoración rustica chic muy agradable. Las instalaciones son magníficas: piscina rebosante con vistas al viñedo, zonas comunes exteriores e interiores decoradas exquisitamente. Los desayunos o brunch en el hotel, y las cenas en el restaurante que tienen en la finca, fueron de nuestro total agrado.Todo un lujo ( no asiatico ) sino muy mediterraneo, con personal dedicado a que todo esté a punto.

  

• A3450DTmanuelr

  28 julio 2017
  Paz entre viñedos

  Impresionante finca. Oasis de paz y armonía. Lujo para el descanso y los sentidos. Impresionante. Complicado acceso que se justifica por lo maravilloso del lugar. Naturaleza, viñedos, caballos, campo, luz, estrellas Lugar inolvidable

  

• juanitodj

  04 agosto 2018
  A piece of heaven

  Un pedacito de cielo entre el infierno ( por el calor, 47 grados...) del bajo alentejo, rodeado de viñedos! Lo diré claro: una de las piscinas de mi vida!! Pero una piscina no hace solamente una corta estancia algo que quieres perdure para siempre, pero si le añades un servicio impecablemente atento y cariñoso, una clientela deliciosa ( o quizás tuvimos suerte después de nuestra terrible experiencia en heredade de esporao ), y sobretodo una sensación familiar, que adoramos y que es tan difícil de encontrar! Peros: nuestra habitación no era la más bonita, y era una suite, pero el gran espacio estaba distribuido torpemente, el armario, el baño ciego, y la parte para niños que no tenemos, pero vimos otras habitaciones deliciosas, a las que volveremos, pero como estaba lleno no podíamos escoger. Además todo el hotel está impregnado de un olor que siendo bueno a nosotros nos parecía muy intenso. Los pros! Todo el resto; esos desayunos, con las tórtolas deliciosas, esa vajilla vista alegre que me hacía pedir un espresso tras otro, esa sensación de calma que detiene el tiempo, y de nuevo, el amor por los pequeños detalles. Esas velas ( por fin ) en la noche, por todo el jardín, tantos lugares donde reposar, diferentes tipos de hamacas, camas, tumbonas. La comida sencilla pero deliciosa, y un spa que sin ser nada del otro mundo,( pequeñito y algo abandonado ) nos vino muy bien para poder ducharnos antes de irnos. Nos quedamos con ganas de cenar en el maravilloso restaurante por no encontrarnos bien el primer día, y muy amablemente nos facilitaron un aperitivo de quesos, jamón y vino para tomar donde quisimos, viendo la luna y escuchando los grillos. A mi parecer , son este tipo de hoteles que no lo son, los más difíciles de encontrar, y me encantaría saber que se mantendrá así, como las imágenes de mi retina viendo los viñedos mientras sofocaba el asfixiante calor en la preciosa piscina ( esos detalles, el mármol, la pizarra, el efecto infinito ) Y remarcó esa atención que te otorga unas botellitas de vino y aceite al irte y que te da la libertad para ser feliz sin necesidad de casi nada ( aunque si lo necesitas tienen una colección espectacular de libros de arte, vinos, arquitectura y como no, de comida!! ) además de música, juegos, revistas y estupendos cocktails! Lo dicho, la felicidad era esto también!