Dorint Bluemlisalp Beatenberg/Interlaken

Comentarios destacados

• rebecap279

  14 julio 2014
  Cosas buenas y menos buenas

  El hotel tiene cosas buenas y la verdad es que hemos estado cómodos, aunque le falta ese algo cálido y especial que encuentras en algunos lugares de los que te enamoras y no sabes porque. La habitación era enorme para los cuatro, muchos armarios, una terraza grande y unas vistas preciosas. Las camas eran cómodas, incluyendo los sofás camas de las niñas, que tenían colchones como los nuestros. También nos gusto la piscina cubierta, abierta hasta las 22:00 y que disfrutamos todos los días en exclusiva (supongo que por la hora a la que íbamos) después de cenar. Además como el baño de la habitación era tan pequeño, aprovechábamos para ducharnos en las agradables y perfectamente acondicionadas de la zona de piscina y saunas. A mis hijas les encantaba este rato después de las palizas que nos dábamos por los increíbles valles y montañas. También hay una sala para niños con muchos juguetes y un piano, hay columpios en el exterior, un minigolf, billar...pero no nos quedaba tiempo para más. Los primeros días cenamos en el buffet, la comida era normalita, nos reservaron una mesa junto al ventanal con vistas al lago y las montañas. Respecto a la comida sin gluten, nos atendió una chica encantadora que tría el pan sin gluten para mi hija en cuanto nos veía entrar, luego nos indicaba cuales de los platos del buffet no tenían gluten. Un día cambian los camareros, ya no hay pan sin gluten hasta que lo pedimos, nuestro ingles no es muy bueno pero hasta este día nos habíamos entendido, pero la nueva camarera no nos entiende, o no nos quiere entender. Al final pedimos el postre y para mi hija celiaca traen un helado con una enorme galleta, una error considerable, pero lo peor es que al decírselo se lo lleva y vuelve a traer el mismo helado pero sin la galleta, con la marca de donde había estado clavada la galleta con restos de la misma, y encima la ...se hace la tonta y me dice que no me entiende. La equivocación nos pareció grave, pero la actitud de esta camarera fue del todo inaceptable, con sonrisas y ... fuimos a dar la queja a otra persona que curiosamente nos entendió, y eso que hablábamos el mismo ingles chapucero. Los dos días que nos quedaban en el hotel decidimos cocinar por miedo a que esta persona pudiese despistarse en el menú de mi hija y sinceramente, también por no tener que tratar con ella. Al hacer el chek out la persona que nos atendió antes de decir nosotros nada nos volvió a pedir disculpas. En resumen, habitación grande y cómoda con bonitas vistas y el plus de la piscina me harían replantearme volver a este sitio, sobre todo si voy con niños, olvide decir que en la mesa del restaurante mis hijas siempre tenían pinturás y cuadernos para colorear, además les regalaron un osito de peluche. Los empleados en general eran agradables y dispuestos, pero para mí era demasiado grande y algo impersonal, el tema de la comida y por supuesto el tema del gluten no me convenció

  

• p02comej

  07 agosto 2015
  Gran recuerdo

  Que gran recuerdo guardamos de nuestro hotel de luna de miel. Todo salio como queríamos, previamente habíamos solicitado habitación con vistas al lago y así fue. Habitación abuardillada, sin grandes lujos, cana comodisima y baño correcto. El enclave del hotel es excelente, en la ladera de una montaña en la que todo viajero amante de la montaña puede soñar. Personal atentisimo. Comida excelente. Soñamos con volver...

  

• Eduard L

  25 julio 2017
  Cosas buenas y malas

  Nos alojamos en este hotel hace exactamente 10 años, teníamos muy buenos recuerdos y la estancia fue muy agradable en todo. Cosas buenas, la ubicación aunque alejado a 15 minutos de Interlaken es un sitio excelente por su tranquilidad y por sus vistas. El que tenga aparcamiento en el mismo edificio y gratis es un plus que en Interlaken cuesta de encontrar sin sobreprecio. Pero hay cosas que no nos gustaron y que a día de hoy después de la experiencia anterior dudaría en volver a repetir puesto que no es un hotel barato. Necesita una renovación y actualizarse, se a quedado anticuado en instalaciones de red sobretodo y en el mobiliario de las habitaciones. El desayuno aunque completo falta mas variedad y sobretodo en pastas o dulces que todo el mundo se preguntaba porque solo habían cruasanes secos. Y sobretodo la cantidad de autobuses de gente Oriental donde avasallan todo por su paso en el desayuno, mientras estas en la habitación escucharlos gritar como si solo estuvieran ellos asi como los movimientos de mobiliario, y lo peor estar en el balcón de la habitación escucharlos hablar y de golpe ver como tosen y escupen balcón abajo y ver pasar lo escupido. Ciertamente esto es muy difícil de controlar y que el echo de hacer paquetes vacacionales a estos grupos dejan dinero,y llenan en hotel, pero hacen pensar a clientes como yo el poder volver a hospedarnos en este hotel. Si estas pequeñas cosas se pulieran y mejoraran yo si que volvería y pagaría lo que cuesta alojarse, mientras tanto en futuras ocasiones no volveria.

  

• germang844

  12 enero 2018
  Lujos de la vida

  El hotel es muy cálido. Hermosa vista. La habitación amplia. Todo confortable y limpio. El desayuno muy bueno. En la confitería, Sandra una genia. Y la pileta es grandísima. El colectivo que te deja en la estación de Interlaken para a 50 mtrs del hotel.

  

• Rafael A

  14 mayo 2018
  Espectacular entorno y grandes instalaciones

  El entorno del hotel es espectacular, la habitación tenía unas vistas excelentes, un salón muy agradable, la zona de cocina perfecta para cenar en familia, sin duda un acierto el alojamiento. El único pero, desde la parte baja de Interlaken al hotel había unos 10 min en coche, pero al final hasta era agradable la subida por los paisajes que íbamos viendo. Y cuando volvíamos de todo el día visitando la zona, un relajante baño en la piscina del hotel, que está fenomenal.