De Zeekoe

Comentarios destacados

• Rosario S

  06 febrero 2018
  Espectacular

  Fuimos a este hotel sin demasiadas expectativas y nos encontramos con un hotel boutique deliciosamente decorado!!! En el medio del campo, alejado de la ruta y la ciudad. Lugar perfecto para descansar y disfrutar.

  

• Cacatuo

  30 marzo 2018
  personal amable y buenas habitaciones

  situada en una zona muy bonita, esta granja tiene unas buenas instalaciones. muy agradable es la sala de lectura con chimenea. el comedor está muy bien situado hacia la puesta de sol. El desayuno es muy bueno y variado. las habitaciones grandes y con todos los servicios. el univo punto a mejorar podría ser los colchones. yo los cambiaría o les pondría toppers. buena piscina con agua de fuente termal

  

• laprest86

  31 agosto 2018
  Fantástico!

  Nos alojamos una noche durante la Ruta Jardín que estábamos haciendo. Y nada más llegar al lugar, nos arrepentimos de que fuera a ser solo una! Increíble lugar, la habitación acogedora, con una decoración preciosa; la comida increíblemente buena; la atención en recepción también; ofrecen numerosas actividades. Ideal para ir tanto en pareja (como fue nuestro caso) como en familia.

  

• Flabi

  29 diciembre 2018
  Hermoso lugar

  Elegimos este lugar porque quedaba cómodo tanto para visitar las granjas de avestruces como para hacer el cruce de las pintorescas montañas Swartberg. En síntesis:Todo muy correcto, lindas vistas, instalaciones bien mantenidas, gastronomía acorde. El personal muy bien instruido aunque con un dejo de demasiada estructura lo cual hace que sean poco cálidos. En el check in empezaron aclarando todos los NO, x ejemplo que si queríamos hacer el paseo para ver las suricatas (promocionado como gran atracción en su website) NO lo podríamos hacer porque ya estaba el cupo reservado para los 2 días disponibles que tendríamos. No volvería, hay muchos lugares lindos para elegir en la zona.

  

• Andres_Nogueiras

  18 agosto 2019
  Un hotel rural con todo el confort

  Está a las afueras de la ciudad, pero es un oasis de tranquilidad y confort. La habitación era amplia, la cama enorme y muy buena la firmeza del colchón. El baño estaba muy limpio, y lo mejor es que tiene un servicio de restaurante, donde cenamos y desayunamos muy bueno. Lo escogimos para poder ver dos cosas: una granja de avestruces y el fantástico amanecer con los suricatos (meerkats).