de Nice

Comentarios destacados

• ManuteG

  09 septiembre 2015
  Hotel céntrico con encanto

  Es un hotel pequeño, con decoración estilo Belle Époque, y se podría calificar como original. Lo mejor es su ubicación, a tres minutos andando del Hotel De Ville (Ayuntamiento) y a cinco de Notre Damme. El barrio de Marais está muy bien con locales muy chic (es el barrio gay y eso se nota...). Te sirven un desayuno típico francés con baguette y croissants. Las habitaciones son pequeñas pero cómodas y muy limpias. El personal es más amable que la media del parisino, que no es mucho, pero suficiente. Volveré

  

• 762juanantonior

  08 febrero 2016
  Esta muy bien para el precio

  Hotel muy recomendable por el precio, desayuno correcto y ubicación excelente muy recomendable, cerca de muchos bares, restaures y tiendas de moda, cama cómoda, y baños limpios con agua muy caliente y calefacción en todo el edificio

  

• Pilar B

  24 enero 2018
  EXCELENTE UBICACIÓN Y DECORACIÓN GLAMUROSA. MUY RECOMENDABLE

  Este hotel es valioso por muchas razones, por su ubicacion, en plena calle Tivoi y por su glamurosa decoracion, muy Belle Epoque, preciosa y muy chic. Es de reseñar la calidez del personal, limpieza y la excelente relacion calidad/precio. He intentado alojarme en otras ocasiones pero están a tope de reservas. Muy recomendable.

  

• cosmedchurruca

  13 abril 2019
  Desilusión

  Ubicación genial; todo el Marais a tu alcance. Notre-Dame a un paso. La habitación horrible, por lo menos la nuestra; las camas una a continuación de la otra. Como dormir en un pasillo. Además había obras de remodelación en un local de los bajos y trabajaban día y noche. Un horror. Por lo menos el desayuno estaba incluído.Si teneis suerte con la habitación seguro que no está tan mal. Ah! la recepción en el primer piso.

  

• OrlandoTunnermann

  02 junio 2019
  Un hotel con encanto precioso, un viaje a principios del siglo XX

  Una maravilla este hotel con encanto en la céntrica calle Rivoli, una arteria de Paris vibrante de vida. Parece que te has transportado hasta principios del siglo XX con su estética añeja, de siglo pasado. Comodisimo, precioso, atienden muy bien, especialmente una mujer muy simpática que habla español y nos ayudó con todo en todo momento, se duerme muy bien, y aunque las habitaciones son pequeñas están muy bien aprovechadas. Es una maravilla el salón de estilo parisino antiguo, que es como una sala palaciega, donde se desayuna, muy abundante y rico todo, por cierto.