Da Peneda

Comentarios destacados

• ceciliaramillopez

  21 agosto 2015
  Huyendo de la ciudad

  Este hotel es un lugar perfecto para escapar de la ciudad, el ruido, el agobio... Está en un sitio muy bonito, con un santuario al lado y mucha naturaleza rodeándolo. Tanto la estancia como la cena estuvieron muy bien, así que estoy deseando volver!

  

• TigerTony1212

  17 febrero 2016
  Un paraje impresionante

  El hotel es cómodo y tiene buena calefacción (imprescindible en invierno). El trato es amable y familiar. La cocina es correcta. Pero lo mejor es el paraje: las rocas cercanas, las cascadas al lado del hotel, el pueblecito cercano y el monasterio abandonado donde se sitúa el hotel. Y, en general, el Parque de Peneda-Geres y los alrededores, perfectos para olvidarse del mundo o para hacer tranquilas caminatas. El hotel tiene otros dos alojamientos que deben alquilarse en grupo, uno de ellos, un albergue excelente para montañeros y muy económico.

  

• fomchi

  17 mayo 2016
  Como en casa

  Un sitio encantador,tranquilo y buena comida,si buscas descargar estrés y cargar pilas es uno de los mejores sitios,unas vistas espectaculares a a montaña,y si eres un apasionado de la naturaleza tienes unas rutas preciosas recomendado.

  

• riverogz

  17 abril 2017
  Personal y dirección inmejorable!!!

  Hemos pasado esta semana santa con un grupo de amigos en este hotel, ha sido una experiencia inmejorable!. Como todos los años por estas fechas, organizamos una reunión de amigos que llegan desde distintos puntos de la peninsula, todos y cada uno de nosotros nos hemos sentido como en casa!!! la comida, las habitaciones, el trato... fantástico, de lo mejor que nos ha tocado hasta la fecha!. Gracias a todo el personal del hotel por hacer sentir así de cómodos! Volveremos!

  

• angelcc2019

  08 agosto 2017
  Incomprensiblemente malo.

  Habitaciones e instalaciones discretas, bastante mejorables, y no invirtiendo mucho. Dos noches allí, la primera, únicos alojados, la segunda, otra habitación ocupada. El primer dia, sin agua caliente, al parecer fue un olvido encender la caldera... Las contraventanas interiores de la ventana, goteando literalmente resina al suelo... El extractor del baño, debía ser de Formula 1... Una minitelevision y un ventilador por todo equipamiento. La limpieza, aparentemente bien, pero desconozco con qué periodicidad cambian las sábanas, diariamente no. El desayuno, aparentemente buffet, pero con muy poca variedad. Eso si, como estabamos solos, era curioso ver cómo, en otra mesa, la gerencia del hotel hablaba de balances, resultados, impuestos, maquillajes... Mientras las moscas daban buena cuenta del buffet. Si en lugar de dedicarse a ciertas cosas se dedicaran a promocionar el hotel y mejorar el trato e instalaciones, posiblemente no se viera un hotel vacío en el mes de julio. A no ser que no quieran ganar dinero para pagar menos impuestos. En fin, incomprensible. Por cierto, para cenar hay un snack a 50 metros con una buena calidad, un buen precio, y un trato excelente.