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1 noche desde
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Precio por persona

AC Hotel Diagonal L´Illa

  • de Negocios
  • de Diseño
  • de Shopping
  • Urbanos
  • Hotel
  • 4 Estrellas

Avinguda Diagonal 555, 08029 Barcelona

Valoraciones

4.5 sobre 5

Basado en 298 comentarios

  • Ubicación

    4.5 sobre 5
  • Calidad/Precio

    4.0 sobre 5
  • Habitaciones

    4.5 sobre 5
  • Limpieza

    4.5 sobre 5
  • Servicios

    4.5 sobre 5
  • Calidad del sueño

    4.5 sobre 5

Descripción

Puntos de Interés: Estación de tren 1:Estación de Sants 2.0 kms Aeropuerto 1:Aeropuerto Josep Tarradellas 13.0 kms Puerto:Puerto de Barcelona 8.0 kms Centro Ciudad:Plaza Cataluña 4.0 kms Recinto ferial 1:Fira Barcelona Gran Via 6.0 kms Recinto ferial ...

Disponibilidad

¿Cuándo quieres alojarte en AC Hotel Diagonal L´Illa?

Descripción general

Puntos de Interés:
Estación de tren 1:Estación de Sants 2.0 kms
Aeropuerto 1:Aeropuerto Josep Tarradellas 13.0 kms
Puerto:Puerto de Barcelona 8.0 kms
Centro Ciudad:Plaza Cataluña 4.0 kms
Recinto ferial 1:Fira Barcelona Gran Via 6.0 kms
Recinto ferial 2:Palacio Congresos de cataluña 5.0 kms

Información adicional

Check-in

Desde15:00h

Check-out

Hasta12:00h

Servicios

  • Accesibilidad

    • Adaptado para personas con discapacidad
  • Acceso a internet

    • Wifi gratis
  • Actividades - Tiempo libre

    • Gimnasio
  • Aparcamiento

    • Parking
    • Parking de pago
  • Complementos habitación

    • Recepción 24 horas
  • Generales

    • Bar
    • Guardaequipajes
    • Restaurante
  • Servicios

    • Ascensor
    • Atención en varios idiomas
    • Bar-Lounge
    • Caja fuerte en recepción
    • Centro de negocios
    • Salas de reunión
    • Servicio de botones
    • Servicio de conserjería
    • Servicio de lavandería
    • Servicios de tintorería
    • Terraza

Opiniones del hotel

4.5 sobre 5

Basado en 298 comentarios

  • Ubicación

    4.5 sobre 5
  • Calidad/Precio

    4.0 sobre 5
  • Habitaciones

    4.5 sobre 5
  • Limpieza

    4.5 sobre 5
  • Servicios

    4.5 sobre 5
  • Calidad del sueño

    4.5 sobre 5

Comentarios destacados

  • SANTI675

    EXCELENTE ¡¡¡

    Maravilloso hotel ubicado en la Diagonal, integrado al Centro Comercial LÍIIa pero completamente independiente, forma parte del prestigiado grupo hotelero Marriott, zona residencial, de negocios y comercio, apartada del bullicio del centro de Barcelona, ideal para los que ya conocen la ciudad y quieren comodidad y tranquilidad.

    5.0 sobre 5
  • pilarg50

    Excelente

    Maravilloso hotel situado justo al lado de uno de los accesos al centro comercial de L'Illa.Habitacion amplia y con vistas al parque,la cama super comoda y el desayuno muy bueno y variado.Las chicas de recepcion,de Granada,Carmen e Irene super atentas y amables.Sin duda repetiria.

    5.0 sobre 5
  • Monica S

    Magnifico Hotel situado en la Diagonal

    Hotel perfecto en Barcelona, situado en la Diagona y en un centro comercial con jardines. El desayuno, brutal. Había de todo, para todo tipo de personas y en abundancia, con varias cosas caseras y locales. La habitación amplia y no se escucha nada, las camas muy buenas. El personal amable y con gran atención. Ideal para familias y negocios.

    5.0 sobre 5
  • Adolfo M

    Weekend un Marriot

    Es un bello hotel por dentro, muy moderno, por fuera insignificante. La comida envidiable, la atención esmerada pero rayando en la impertinencia. El servicio en la recepción óptimo. Muy confortable, más o menos céntrico y casi dentro del Centro Comercial, así que las compras estarán garantizadas.

    3.0 sobre 5
  • CarlosAndreu

    Enorme habitación en una ubicación excelente

    Habitación: 517 Fecha de entrada: 28/10/2020 Tarifa: Situado en el centro comercial de L'Illa, en la misma Diagonal ocupando un voluminoso edificio de seis plantas en granito blanco con enormes ventanales cuadrados. Todo ello descansando sobre una planta baja a modo de zócalo en cristal y acero negro. La enorme acera de la avenida realza todavía más el acceso, ubicado junto a una de las bulliciosas entradas al centro de comercial y de ocio. Entre dos altas macetas con plantas y en medio de una larga pared de cristal encontramos una estrecha puerta giratoria, que hemos de empujar pesadamente y a la que se accede tras subir un incómodo escalón. Al otro lado de la puerta una generosa recepción cuadrada. Sensación moderna y amplia. Música suave con toques electrónicos de fondo. Suelo de mármol gris, paredes en madera y cristal. Techos altísimos y mucha luz que viene de las cristaleras que dan a la Diagonal. A la izquierda un pasillo estrecho termina en una escalera de caracol. A la derecha, una mesa grande de madera con un centro de flores y varias sillas alrededor de una biblioteca con libros y revistas. Al fondo, un sofá delante de una pared gris con varias molduras en escayola con luces retranqueadas haciendo como un mural. A la derecha, dos pequeños mostradores individuales, en madera clara con algunos detalles en ámbar. Detrás, toda la pared de madera. Sensación de orden y limpieza en los puestos de trabajo. Nos atiende un joven sumamente amable. El trámite es un rollo: el DNI, la tarjeta de crédito como garantía, el... pero al menos lo hace amablemente preguntándonos por el viaje y dándonos algunas indicaciones y consejos sobre el hotel, sus servicios y los servicios que podemos encontrar en el centro comercial. Por fin nos entrega en una carpetita de cartón la tarjeta que hace de llave de la habitación y nos indica el camino de los ascensores, que quedan al fondo a la izquierda. Son dos, de enormes puertas, algo oscuros, con un espejo al fondo y paredes de madera, suelo de moqueta oscura, enorme botonadura metálica, una pegatina con la información a cuidad por el covid y dos puntos de luz en el techo. Las puertas se abren a un enorme hall que distribuye las habitaciones a derecha e izquierda en unos enormes pasillos, jalonados con enormes columnas redondas de hormigón gris. Suelo de moqueta gris muy suave, techos de color blanco y puertas de color gris oscuro sobre las que hay una lamparita. La cerradura funciona por contacto con la tarjeta. Una vez dentro de la habitación dos sensaciones. Por un lado la amplitud, y por otro la enorme luminosidad que aporta el gigantesco ventanal del fondo de la habitación, que ocupa toda la pared y ofrece vistas a la Diagonal. Cerramos la puerta, que tiene en su parte trasera un espejo de cuerpo entero y una cadena de seguridad para cerrarla. Suelo de madera clara limpia y cuidada y paredes en madera un poco más oscura. A la izquierda la ranura para activar la iluminación y bajo ella un largo maletero de metal rematado en un mullido capitoné de piel. A continuación un armario sin puerta con varias baldas con la caja fuerte en una de ellas, varios cajones, y una barra retroiluminada de la que cuelgan varias perchas normales con el logo de la cadena. Se ofrece también una tabla de planchar y una plancha metida en una bolsa de tela negra. En la pared de la derecha encontramos la puerta de cristal opaco del baño con un tirador en forma de bola metálica. Un paso más adelante el enorme dormitorio. Paredes cubiertas en madera. De tan grande quizá quede algo desangelado. A la derecha el display del aire acondicionado que funciona silenciosamente, pero no demasiado eficazmente. Unos botones seleccionan la temperatura y otros la potencia y se ve reflejado en una pequeña pantalla digital. A la derecha queda también la cama, grande para ser individual, justa para ser doble, vestida en blanco con cuatro almohadas de distinto grosor y dureza envueltas en suaves sábanas blancas con un ribete en gris. El colchón es de enorme calibre, cómodo y mullido. Vestido con un edredón ligero. Se encuentra empotrada en un cabecero de piel gris oscura. A cada lado sendas mesillas de madera con una balda de cristal en el interior. En una de ellas el mando a distancia envuelto en plástico, una botella de agua mineral y una toallita con gel hidroalcohólico. En la otra el teléfono moderno típico de la cadena. Sobre ambas interruptores para apagar las luces de la habitación y enchufes para los aparatos electrónicos. Por encima y ancladas a la pared dos lámparas rectangulares y largas de metal y pantalla en color crudo. Luz amarillenta más cálida que potente para la lectura. El juego de luces se completa con dos puntos de luz en el techo sobre el escritorio, una tira de led bajo el armario, otra bajo el escritorio y otra que recorre todo el foscurit. En el enorme espacio que queda al fondo de la habitación y bajo la ventana, que no es practicable, hay una mesa ovalada y dos sillones de piel gris. Un visillo leve blanco y un foscurit gris anclado a la pared en ambos lados cubren la enorme cristalera con vistas a la ciudad. La luz no entra durante la mañana. La insonorización del edificio por dentro es algo mejorable. Se escuchan los ruidos en la habitación contigua, aunque el hotel es claramente tranquilo y más en este momento de pandemia. Quizá por la ventana se escuche demasiado el pesado tráfico de la avenida. A la izquierda del dormitorio un largo escritorio demasiado bajo para trabajar, y sin silla delante. Es simplemente una madera apoyada sobre sendas patas metálicas. Sobre ella una bandeja de cortesía con una cafetera nespresso con algunas cápsulas de café, azúcar, vasos y una botella de agua mineral. Por debajo de la mesa, el minibar, vacío, que hace demasiado ruido y acabamos desenchufándolo. El baño mantiene el mismo suelo de madera que el resto de la habitación, pero algo más deteriorado por culpa de la humedad. Enfrente de la puerta un armario de madera abierto en el que encontramos una toalla de manos y un secador de pelo metido en una bolsa de tela negra. Bajo él una papelera de metal oscuro. La parte de arriba del armario es una encimera de silestone blanco con un lavabo moderno y poco profundo, algo incómodo para lavarse bien las manos. Grifería monomando moderna con escaso caudal. Una pastilla de jabón rectangular metida en una caja de cartón con el logo de la cadena es la única amenitie que se ofrece. Dentro de la ducha encontraremos un bote de gel y otro de champú. Encima del conjunto un gran espejo con dos puntos de luz en el techo para iluminar. A la derecha de la puerta queda el inodoro con la cisterna exenta y frente a él un bidet. A la izquierda, junto a dos pequeñas perchas, una gran cabina de ducha con suelo suave en color blanco y una mampara de cristal de techo a suelo. El grifo monomando se remata con una alcachofa de teléfono con buen caudal, presión y temperatura. Una toalla de baño cuelga de la barra, y en una pequeña bandeja rinconera encontramos los botes de gel y champú. Junto a la entrada de la ducha, en el suelo, doblado un pie de ducha con el logo de la cadena igual que el resto de la lencería blanca, cuidada y mullida. Por la mañana, en una planta intermedia con vistas a la Diagonal se sirve el desayuno en mesa. Un simpático y eficaz camarero nos sirve lo que le pidamos de la elección de la carta que incluye tortilla de patata (congelada), fruta, tostadas, mantequilla y mermelada, tomate triturado, aceite, bacon crujiente y recién hecho, zumos variados, agua, bollería crujiente y caliente recién hecha y un estupendo café. En la despedida en recepción el mismo joven amable que estaba en la llegada se preocupa interesado por nuestro descanso y por si necesitamos alguna cosa para continuar nuestro viaje. Calidad/precio: Servicio: 8.5 Ambiente: 8 Habitación: 8.5 Baño: 8.5 Estado de conservación: 8.5 Desayuno: 8

    4.0 sobre 5