Explora los tesoros de Jordania, un destino único

El patrimonio arquitectónico de Jordania es un testimonio de su pasado histórico. Entre los sitios más destacados se encuentran las ruinas greco-romanas de Jerash, uno de los lugares mejor conservados -dentro de su categoría- en el mundo. Aquí, los visitantes pueden explorar impresionantes columnas, teatros, templos y arcos, que datan de los siglos I y II d.C.

Además, los dólmenes prehistóricos en el este de Jordania son un misterioso conjunto de tumbas megalíticas que se remontan a miles de años atrás. Aquí podrás viajar al pasado y descubrir la antigua cultura que habitó estas tierras mucho antes de la llegada de las civilizaciones clásicas. ¡Una experiencia fascinante!

Las iglesias bizantinas también forman parte esencial del patrimonio arquitectónico jordano, destacando las de Madaba y Umm ar-Rasas. Asimismo, el Ferrocarril de Hejaz, conocido como el Ferrocarril Otomano, fue una importante línea de tren que conectaba Damasco con Medina a través de Jordania. Parte de esta histórica vía férrea aún se encuentra en pie en Jordania y se ha convertido en una atracción turística muy interesante.

Y, si eres un auténtico amante de la mitología, no dudes en visitar las Ruinas de Hércules, en Aqaba. Es el sitio arqueológico más relevante de la ciudad, donde destaca una antigua fortaleza, conocida como el Castillo de Aqaba o el Castillo de Hércules, desde donde podrás disfrutar de impresionantes vistas del Mar Rojo y la ciudad.

Jordania es un país de contrastes naturales, desde el punto más bajo de la Tierra hasta majestuosas montañas. El punto más destacado es, sin duda, el Mar Muerto, que es famoso por su alta concentración de sal, lo que permite a los visitantes flotar en sus aguas terapéuticas. ¡Muy divertido! Además, es un escenario ideal para ver las espectaculares puestas de sol.

En contraste con la exuberancia del Mar Muerto, los desiertos de Jordania ofrecen una belleza austera pero inolvidable. El desierto de Wadi Rum, conocido como el Valle de la Luna, es una vasta extensión de arenas rojas y acantilados escarpados. Podrás disfrutar de paseos en camello, safaris en jeep y noches bajo el manto estrellado del desierto. Además, si eres un auténtico cinéfilo, te gustará saber que Wadi Rum ha sido el escenario de múltiples películas de gran renombre como Dune, Star Wars: Episodio IX, Lawrence de Arabia o The Martian.

En el norte de Jordania, se encuentran las montañas más altas del país, como la Montaña Nebo, mencionada en la Biblia como el lugar desde donde Moisés contempló la Tierra Prometida. Una visita ineludible donde los amantes del senderismo pueden disfrutar de impresionantes vistas panorámicas de Jordania y la vecina Palestina.

Amman, capital de Jordania, es una ciudad que combina historia y modernidad. La Ciudadela y el Teatro Romano son las dos visitas imprescindibles para conocer el pasado de la ciudad. Además, cuenta con bulliciosos mercados, centros comerciales y una animada escena cultural.

Petra es, sin lugar a dudas, el destino más visitado de Jordania. Conocida como la «Ciudad Rosa», es un sitio arqueológico declarado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO. Famosa por su icónico Tesoro (Al-Khazneh), Petra es una antigua ciudad nabatea esculpida en piedra y rodeada de majestuosos acantilados, considerada una de las siete maravillas del mundo moderno. 

Salt, conocida como «la ciudad del Islam», es un tesoro arquitectónico que cuenta con impresionantes edificios históricos, calles empedradas y mezquitas antiguas. Tal es su relevancia histórica, que fue nombrada Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO.

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