Bienvenido al, un fascinante recorrido que te llevará a explorar su rica gastronomía, naturaleza y destacado patrimonio cultural. Desde los pintxos de Bilbao hasta el vino de Rioja Alavesa, pasando por los paisajes naturales de sus parques y joyas de la UNESCO, ¡Te espera un viaje inolvidable!
A lo largo de la primera etapa, de Bilbao a Lekeitio, los pintxos y el bacalao al pil-pil son protagonistas, junto con dulces emblemáticos como el bollo de mantequilla. En la segunda etapa, de Lekeitio a Zarautz, te deleitarás con los sabores del mar como el verdel, la anchoa y el besugo, maridados con el característico txakoli.
En la tercera etapa, de Zarautz a Donostia/San-Sebastián, la cultura gastronómica cobra vida con el txuletón y la sidra. Por su parte, en el cuarto tramo de la ruta, de Donostia/San-Sebastián a Vitoria-Gasteiz, el queso Idiazabal es la estrella y además encontrarás mercados locales que ofrecen productos gastronómicos de calidad.
En la quinta etapa, de Vitoria-Gasteiz a Laguardia, el vino se vuelve protagonista junto con dulces como el goxua y los polvorones Felipe II. ¡Deliciosos! El tramo entre Laguardia y Orduña, la sexta etapa, combina pintxos, txakoli y dulces tradicionales como las mantecadas de Orduña, un imprescindible en tu ruta.
En la séptima, de Orduña a Bilbao, el txakoli de Artziniega y las sardinas de Santurtzi destacan entre las delicias locales. Finalmente, en la octava etapa, de Lekeitio a Vitoria-Gasteiz, la cocina de caserío y el queso de Gorbeia cierran una ruta con autenticidad y mucho sabor. ¡No te la pierdas!
Si eres un apasionado del enoturismo, el Euskadi Basque Country Grand Tour es, sin lugar a dudas, un plan perfecto para ti. La Bodega El Fabulista, en Rioja Alavesa, no solo ofrece vino de calidad, sino que es toda una experiencia inmersiva que te teletransportará a tiempos pasados a través de una visita teatralizada. Por su parte, Bodegas Lozano es el lugar perfecto para introducirse en la viticultura, ya que conocerás el proceso de la elaboración del corcho y probarás sabores inigualables.
La Bodega Crusoe Treasure, en Plentzia, ofrece una experiencia excepcional que sorprende a todo tipo de visitantes. Se trata de una bodega submarina, donde los vinos maduran bajo el mar Cantábrico en un entorno rodeado de un arrecife artificial que le aporta características muy destacadas. ¡Una experiencia que tienes que vivir!
La afamada Marqués de Riscal, en Elciego, es un mix de tradición y modernidad. Su hotel se ubica en un icónico edificio diseñado por Frank Gehry, incluye recorridos por los viñedos, catas guiadas y una verdadera experiencia inmersiva en la historia de esta prestigiosa bodega.
No te puedes ir de Euskadi sin degustar el txakoli, el vino blanco más popular, o visitar una auténtica sagardotegi -sidrería-.
El patrimonio cultural reconocido por la UNESCO en Euskadi es muy diverso y muestra la riqueza histórica, natural y artística de la región. Entre sus joyas más destacadas se encuentra el Puente Bizkaia, un símbolo de la Revolución Industrial y el primer puente transbordador de estructura metálica del mundo que conecta las orillas de Getxo y Portugalete.
En Bilbao, la Catedral de Santiago es una visita obligada y una pieza fundamental de la arquitectura gótica de Euskadi. La Catedral de Santa María, en Vitoria-Gasteiz, no se queda atrás. Ambas, junto al Monasterio de Zenarruza, son paradas clave para los peregrinos que realizan el Camino de Santiago.
Ubicado en Zegama, el Túnel de San Adrián es parte de una ruta de senderismo que te mostrará paisajes asombrosos del Parque Natural de Aizkorri-Aratz. Siguiendo la línea de joyas naturales, la Reserva de la Biosfera de Urdaibai te sorprenderá con su increíble biodiversidad, así como el Bosque de Oma, famoso por sus pinturas sobre los troncos de los pinos, o el Geoparque de la Costa Vasca, miembro de la red de Geoparques Mundiales de la UNESCO.
La Cueva de Altxerri y Albaola -una factoría marítima- son dos spots perfectos para adentrarse en la cultura de la región. El primero de ellos aún conserva pinturas rupestres de unos 39.000 años atrás, consideradas las más antiguas de Europa. El segundo te invita a descubrir el pasado marítimo vasco a través de una visita guiada en un ballenero del siglo XVI.
Si viajas con la familia al completo, Euskadi Basque Country Grand Tour te ofrece un sinfín de actividades adaptadas a todo tipo de edades, desde escapadas a la naturaleza, como culturales y gastronómicas. En Bilbao y en sus alrededores, no pueden faltar las paradas en el Museo Guggenheim o en el famoso Puente Bizkaia, dos de los iconos más representativos.
En Zarautz y Donostia/San-Sebastián, además de los museos y monumentos, las familias pueden disfrutar de un día completo de playa y gastronomía local, con pintxos y mariscos frescos. ¡Un plan perfecto! Asimismo, el pequeño pueblo pesquero de Lekeitio es ideal para disfrutar de actividades acuáticas, paseos por la orilla o simplemente relajarse al sol.
Para los que prefieren el contacto con la naturaleza, la Reserva de la Biosfera de Urdaibai es ideal para hacer largas rutas de senderismo y poder observar y disfrutar del mundo de las aves y sus migraciones. El Valle Salado de Añana no se queda atrás, se trata de un antiguo sistema de producción de sal y un paraje natural sin precedentes, declarado Bien de Interés Cultural.
Los variados paisajes naturales de Euskadi son un auténtico paraíso para los amantes del cicloturismo y diferentes actividades en pleno contacto con la naturaleza. Uno de los destinos más destacados para ello es el Parque Natural de Urkiola, compuesto por frondosos bosques, montañas escarpadas y una rica biodiversidad. En un paseo en bicicleta por sus caminos, podrás descubrir leyendas locales como la del Basajaun, el Señor de los bosques.
Otro parque singular es el Parque Natural de Gorbeia, el mayor de la región, donde las rutas por sus densos bosques de robles y hayas ofrecen impresionantes vistas panorámicas del monte Gorbeia. Los caminos de este parque confluyen en la icónica Cruz del Gorbeia, símbolo emblemático de la zona. ¡No te lo pierdas!
El cañón de Delika es un impresionante destino que ofrece una ruta de 7 kilómetros siguiendo el curso del río hace el impactante salto de agua. Una excursión orientada a los más aventureros y que promete unas vistas panorámicas espectaculares.